Esta tarde se ha lidiado la primera de las novilladas programadas por la empresa Pagés para el mes de septiembre en Sevilla. La novillada ha sido de Cebada Gago, exceptuando el quinto que fue de García Cebada. La novillada excelentemente presentada habría pasado por corrida de toros en cualquier otra plaza, y teniendo en cuenta el escaso oficio de los actuantes pues sólo se ha cortado una oreja.
En primer lugar ha toreado el pacense Miguel Larios que supo sacar al cuarto de la tarde, el mejor de los cebadas, todo lo que llevaba dentro. Este animal tuvo recorrido, fijeza y bondad que derrochó en los trastos del de Badajoz, que es apoderado por Paco Alcalde. Se dejó ver su buen gusto toreando con el capote en sus dos oponentes, aunque el primero fue un toro más mansito que no le permitió el triunfo que él habría deseado, y con el que escuchó silencio tras dos avisos. Pero afortunadamente le tocó en suerte el cuarto, el mejor del encierro con el que se encontró a gusto y lo toreó muy templado, con ritmo en una faena muy armónica sobre todo por el pitón derecho. Lo mató de estocada y paseó una oreja cortada a ley.
A Raúl Sáez le tocó en primer lugar un novillo que tuvo más movilidad y con el que el murciano no acabó de entenderse pues le faltó templarlo para poder mandarlo. No anda mal del todo, pero acusó su falta de técnica y su falta de contratos y fue silenciado. El quinto fue el de García Cebada, con el cual no tuvo opciones pues no tuvo casta por lo que casi no se movió, No tuvo tampoco fijeza, ni recorrido y lo que derrochó fue sosería a raudales y encima fue hasta violento, por lo que sólo le quedó pegarse un arrimón del que fue finalmente prendido sin graves consecuencias aunque sí tuvo que hacer una visita a la enfermería tras darle muerte. Tras recoger una ovación en el tercio, decidió unilateralmente dar una vuelta por su cuenta que fue pitada por parte del público.
En tercer y último lugar ha toreado Joao Augusto Moura que ya dejó buen ambiente en su presentación el pasado mes de junio en esta misma plaza. Pero el portugués se ha estrellado con un lote que no le ha dejado hacer su toreo, aunque con el primero se pudieron vislumbrar sus ganas y su buen concepto dejando detalles de su toreo en el toreo por el lado derecho, pero no fue suficiente para lograr el triunfo soñado. A pesar de matar mal, recogió una ovación desde el tercio. Con el que cerró plaza, tuvo aún menos que hacer pues fue un animal que no le aportó nada para poder entenderse con el triunfo.
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