Sevilla Novillada de promoción. La noche para David Plaza dos orejas y petición de otras dos

Tercera nocturna de promoción de La Maestranza Erales de Cayetano Muños de muy jeugo  primero, cuarto y quinto
David Martín oreja con petición y oreja con petición
Fernando Plaza Ovación y silencio
Calerito Silencio y Ovación

Han gustado muco las maneras del novillero de Castilblanco que se postula como finalista del ciclo para el jueves que viene. Calerito ha mostrado sus torería con cierta precipitación y queriendo arrollar la razon, Plaza ha toreado más con la cabeza que con e corazón y la muleta

Crónica de Pagés

David Martín recibió a portagayola al que abrió plaza, lanceando después a la verónica para rematar con otra larga de rodillas. Respondió por chicuelinas al asentado quite de Fernando Plaza y brindó su faena al respetable para iniciar el trasteo en los medios aprovechando la clara embestida del novillo. Aunque con la carita un poco suelta, el animal tuvo calidad, sobre todo por el pitón derecho, por el que toreando sin el estoque simulado llegaron las dos series más entonadas. La certera estocada puso en sus manos la primera oreja de la noche.

Se lidiaron novillos de Cayetano Muñoz, bien presentados y desiguales de juego. Destacó por su calidad el primero, aplaudido en el arrastre.

David Martín, oreja y oreja con petición de la segunda.

Fernando Plaza, ovación tras aviso y silencio tras aviso.

Juan P. García 'Calerito', silencio y silencio.

La plaza registró tres cuartos de entrada en noche agradable.

Al cuarto también lo recibió a portagayola, respondiendo con oficio a la pérdida del engaño cuando intentaba la verónica. Otra vez por chicuelinas, mejoró el quite del compañero y el comienzo de faena por bajo fue dominador. La pena es que el animal quedó paradito, ante lo que el chaval insistió para mostrarse muy por encima de las circunstancias. Tras una gran estocada se le pidió el doble trofeo, aunque con buen criterio el presidente Andrés Luque dejó la cosa en una oreja. 

 

Más efectivo que lucido resultó el recibo de capa de Fernando Plaza al segundo, falto de fijeza, llegando los primeros oles con el quite de Calerito. El madrileño brindó al respetable y derrochó quietud en los estatuarios iniciales en los medios. No obstante, el novillo amagó con rajarse en la primera serie al natural y lo hizo definitivamente en la segunda. Plaza apretó al hilo de las tablas, llevándose a cambio una voltereta sin consecuencias y la ovación del público tras la estocada final. El burraquito quinto lo desarmó al tercer lance de capa. El animal tuvo cierta calidad por el pitón izquierdo y lo aprovechó Plaza en un par de series antes de que llegará otro desarme. Por el derecho, el astado repuso e hizo hilo, desvaneciéndose el trasteo y desconectándose el público. Con los aceros, precisó de tres descabellos

 

Calerito lanceó a la verónica con gusto a su primero, rematando en el centro del platillo con dos medias de enorme sabor. Ya en los quites, el novillo se quedó más corto, aunque el trianero afincado en Aznalcóllar y muy ligado también a Gerena, no dudó en brindar la faena a su descubridor, Espartaco padre. Lo malo es que el novillo, brusco, sin humillar y quedándose corto no se lo puso nada fácil, imponiéndose finalmente las asperezas del animal con fea voltereta incluida, por fortuna sin consecuencias. Tres pinchazos precedieron a la estocada final. El que cerró plaza, otro ejemplar de pelo burraquito, le permitió quitarse la espinita a medias. Hubo sabor en los doblones iniciales para salirse a los medios e incluso dos series entonadas por el pitón izquierdo, pero entonces llegaron dos inoportunos desarmes y ya el novillo quedó también más paradito. A este lo mató de pinchazo y estocada.