La plaza Monumental de Aguascalientes lució un lleno impresionante el día del evangelista San Marcos, en un ambiente sin igual el torero de la tierra de las aguas cálidas ha hecho vibrar a su gente.
Una oreja ha cortado al tercero de la tarde, un buen astado de Campo Real que le permitió a Macías realizar una labor que encendió las pasiones en el tendido.
Largas de rodillas pegadas a tablas y lances a pies juntos y el remate con media rodilla en tierra fueron el inicio de una faena que subió como la espuma, luego de la vara llegaron las gaoneras ceñidísimas sin mover las zapatillas de la arena, en una estampa muy torera.
Muleta en mano se lo pasó por la espalda hasta en tres ocasiones eslabonando trazos de emociones de cara al tendido.
Tandas por el derecho lentos, suaves y sentidos, para que posteriormente llegaran los naturales de reposo en una conexión con aires de feria y de fiesta abrileña.
Para ese entonces las embestidas eran más escasas y Macías se las extrajo, cruzándose en la cara, sacándole muletazos de vuelta entera y mostrando el valor que le caracteriza, al final entre el ánimo de la afición llegaron las manoletinas y para la rúbrica se volcó en el morrillo dejando una estocada entera en buen sitio y así llevarse la oreja que lo convertiría en el triunfador de la tarde.
Con su segundo ha tenido una labor de extrema conexión con su gente ante un astado que tenía poca fuerza, Macías puso toda la disposición y entrega muletazos de rodillas acortando las distancias para hacer que su gente disfrutara del día de San Marcos, sonó la pelea de gallos en las alturas y aquello rompió en un cúmulo de emociones, pero la espada le jugó una mala pasada y todo quedó en fuertes palmas.
Sus alternantes Pablo Hermoso de Mendoza escuchó división de opiniones y salió al tercio mientras que Fermín Spínola se fue en vacio.
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