Parece que hay quien busca entre los equipos de los rejoneadores, Fermin, Pablo y Diego, con la responsabilidad de la empresa y buscando la anuencia de la autoridad, (que a día de hoy sigue en el limbo de las decisiones pospuestas) que en La Merced, se lidien dos toros que cada cual traería debajo del brazo y sin pasar el mal trago del sorteo.
Despues de las malas experiencias de Olivenza, Valencia, Jaen y Madrid, no parece de recibo que Huelva acabe siendo otro campo de experimentación con las cosas de comer, con las que, de pequeños, nos enseñaron nuestros mayores que no se jugaba.
No parece torero, ni propio de las figuras, ni adecuado para una feria de cierto nivel, ni aceptable por el público, por muy distinto que lo sea el de rejones, ni está clara la legalidad de la medida, ni parece necesario en un año con tanto ganado en el campo, que ya para entonces podrá estar rematado.
En fin, esperemos que sólo sea un globo sonda. De todas formas esto es lo que dice sobre el sorteo el actual reglamento andaluz, aprobado mediante el decreto 60/2006, del 21 de Marzo de 2.006, en su artículo 41
. Sorteo de las reses, apartado y enchiqueramiento.
1. De las reses aprobadas para la lidia se harán por los espadas, apoderados o por dos
miembros por cuadrilla como máximo, tantos lotes como espadas deban tomar parte en la lidia,
decidiéndose, posteriormente, mediante sorteo, el lote que corresponde lidiar a cada espada. En el sorteo
deberá estar presente el Presidente o Presidenta del espectáculo y la persona que actúe como titular de la
Delegación de la Autoridad y podrán presenciarlo cualesquiera de los profesionales que vayan a intervenir
en el espectáculo. En caso de haberse aprobado reses de ganaderías no anunciadas en el cartel, el
sobrero o sobreros pertenecerán preferentemente a las no anunciadas, de conformidad con lo dispuesto
en el artículo 35.3 del presente Reglamento.
Lo que si os pido es que no acudais en busca de ayuda a mi amado DRAE, ese día estarían somnolientos los académicos o han redactado la entrada pensando en esta posibilidad, los sobrecogedores lo acaparan todo.
1. tr. Acción de someter a alguien o algo al resultado de los medios fortuitos o casuales que se emplean para fiar a la suerte una resolución.
1. tr. Acción de someter a alguien o algo al resultado de los medios fortuitos o casuales que se emplean para fiar a la suerte una resolución.
3 comentarios:
No sé si habrá por aquí algún abogado (del diablo) que nos pudiera sacar de la duda (aunque sea el Moeckler, o como demonios se escriba), pero si esto se hiciese, como se intentó hacer en Jaén o como se hizo hace unos días en Madrid, ¿podría ir cualquier aficionado con su entrada de haber asistido al festejo y poner una denuncia en el juzgado al presidente de la corrida?
Admirado Javier, esto que esta ocurriendo no tiene nombre es igual o parecido a que se autorizara que los chavales en examenes que llevarán chuleta preparada.
Habría que preguntarse ¿Quien quiere acabar con las corridas, los antitaurinos o los taurinos?.
¿El Toreo ya no es lo que era? ¿O podremos seguir teniendo ESPERANZA?.
No me lo puedo creer. Hay que meter miedo a los taurinos y echarlos del toro. Que se atugestione o se sugestionen o se acojonen ellos solos. !!Vaya tropa¡¡
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