martes, 1 de septiembre de 2015

Uno de Navalrosal y Carbonell Una nocturna en Madrid de Certamen Nacional de Novilladas año 2002. Esas nocturnas que tanto dieron

Llegar al "Cuartoestá" de un amigo en Gibraleón y encontrarme a dos amigos  en la Plaza de Toros de Madrid. Las Ventas. 9  de agosto de 2002. Novillada de la ganadería de Navalrosal. Martín Núñez, Nuno Velazquez y José Luis Miñarro,  

José Luis Miñarro ha sido el primer novillero en cruzar la Puerta Grande venteña en el V Certamen Nacional de Novilladas, cuya final se celebrará el próximo viernes. Junto con Miñarro harán el paseíllo Luis Bolívar y Raquel Sánchez.
José Luis Miñarro, que en Valencia ya había levantado el hacha de guerra alzándose ganador del concurso «Se busca un torero», obtuvo el viernes en su debut en Madrid otro importante éxito tras una firme actuación con la novillada de Navalrosal -una auténtica corrida de toros-, que ofreció escaso juego, salvo el noble primero; el quinto fue sustituido por un sobrero del mismo hierro. El valenciano saludó al tercero de hinojos, con una larga en el tercio, muestra de su disposición. El novel espada derrochó valor y dejó constancia de su conocimiento del oficio en una seria y notable faena en la que aguantó impávido las miradas de su difícil rival. Se entregó en la estocada y arrancó una oreja con petición de la segunda. En el sexto, después de lucirse en un ceñido quite por gaoneras con el quinto, conquistó el premio que lo aupaba a hombros. Prologó faena citando desde los medios con dos emocionantes pases cambiados por la espalda. Tras una vibrante actuación, en la que dibujó varios muletazos templados, mató a su astifino oponente de una estocada defectuosa.


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Haciendo hilo

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