Alejandro Conquero, palmas y ovación.
Fernando Flores, palmas y silencio.
Una tarde sin trofeos por culpa de los fallos a espadas de los dos novilleros
Texto y fotos Eldiariomontañes |
Se lidiaron cuatro novillos de El Puerto de San Lorenzo, desiguales de presentación y juego. Con muy poca cara el primero, de pitones romos el segundo, y con más cuajo y mejor armados tercero y cuarto.
El tercero tuvo nobleza y calidad; también fue colaborador el primero aunque tuvo pocas fuerzas; el segundo tuvo un pitón derecho aprovechable; el cuarto fue un manso aquerenciado en tablas.
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