Diego Ventura sigue sin bajar el listón en sus actuaciones salga como salga el ganado y se enfrente con quien se enfrente en el ruedo. Anoche volvió a estar a una enorme altura en Moita (Portugal), donde hizo dos buenas faenas premiadas con la vuelta al ruedo en cada uno de sus toros.
Por encima de resultados, y dado que el Portugal no se cortan orejas, queda la impresión de haber visto a un rejoneador cuajado y en un momento dulce, capaz de hacer cosas a los toros que marcan la diferencia entre él y el resto.
A su primero lo paró con Buena Vibra, templando muy bien y clavando dos ferros. En esta faena sacó a dos grandes estrellas de la cuadra: Nazarí y Milagro, cuajando una soberbia actuación con ambas cabalgaduras. Nazarí demostró que está plenamente recuperado del percance de Málaga templando de forma increíble en sus galopadas de costado y clavando dos buenos palos. Hasta cinco banderillas puso con Milagro, una yegua que atraviesa un momento cumbre. Fue toda un manual sobre la suerte del quiebro el que desplegó Ventura en este toro. Dio una vuelta al ruedo con un público entregado a su obra.
En el segundo de su lote sacó a Demonio, con el que puso dos rejones de salida. En banderillas empezó con Oro clavando dos buenas banderillas, continuó con Chalana, con el que puso tres, y la guinda corrió a cargo de Morante, con el que clavó en todo lo alto, adornándose después con los esperados bocados, que llegaron mucho al público. Ventura culminó de este modo su triunfo en suelo portugués, la tierra que le vio nacer.
Ficha del festejo:
Plaza de toros de Moita (Portugal). Lleno.
Se lidiaron toros de Passanha.
Joao Salgueiro, vuelta y vuelta.
Diego Ventura, vuelta y vuelta.
Joao Telles jr, vuelta y vuelta.
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