Iván dandiño oreja y dos orejas
Rafael Cerró silencio y silencio
Los diestros Miguel Abellán e Iván Fandiño,, han salido hoy a hombros en la corrida de toros celebrada en Cieza, en la que el tercer integrante de la terna, Rafael Cerro, se ha ido de vacío. Al 166, que estuvo en lacplaza de toros de Huelva se le ha pedido el indulto con fuerza, Fandiño cumbre con él, después de dos avisos y cinco estocadas le han concedido la oreja
Se han lidiado seis toros de la ganadería La Dehecilla, variados de capa, correctos de presentación y de muy buen juego
La plaza registró más de media entrada.
Miguel Abellán, oreja, y dos orejas.
Iván Fandiño, oreja tras dos avisos, y dos orejas.
Rafael Ferro, silencio, y silencio tras aviso.
Francisco Ojados "Laverdad.es" lo cuenta así
También paseó tres orejas Iván Fandiño. La faena al segundo de la tarde, un toro engatillado de cuerna, que tuvo transmisión y recorrido, fue la de más entidad artística de la tarde. Tomó con claridad la capa del vasco, que firmó un vistoso saludo compuesto por cuatro verónicas, dos chicuelinas y una larga soltando el capote a una mano de mucha plasticidad. Brindó al mayoral de Pereda, y en el comienzo de faena, hubo un trincherazo y un pase de la firma de mucho empaque. 'Rumboso', que así se llamó el toro, se abría en cada muletazo y repetía, echando la cara arriba en los embroques. Fandiño le cuajó tres series en redondo muy limpias, especialmente buena la tercera, iniciada con el pase de las flores y cerrada con el de la firma. Después vinieron cinco molinetes engarzados, cargando la suerte, rematados con el de pecho. Se alargó la faena buscando el indulto, pedido con fuerza por el público, y le cayeron los dos avisos, el primero toreando y el segundo al pinchar en dos ocasiones antes de la estocada. Incomprensiblemente luego no se pidió la vuelta al ruedo del toro en el arrastre. Desorejó al quinto, un colorao que se dejó torear. Lo saludó con lances a pies juntos rematados en el centro del anillo con la media. Brindó al público y la faena tuvo buenos momentos al natural, atacando al final el torero, poniendo emoción al trasteo. Tras un pinchazo, mató de entera.
Francisco Ojados "Laverdad.es" lo cuenta así
También paseó tres orejas Iván Fandiño. La faena al segundo de la tarde, un toro engatillado de cuerna, que tuvo transmisión y recorrido, fue la de más entidad artística de la tarde. Tomó con claridad la capa del vasco, que firmó un vistoso saludo compuesto por cuatro verónicas, dos chicuelinas y una larga soltando el capote a una mano de mucha plasticidad. Brindó al mayoral de Pereda, y en el comienzo de faena, hubo un trincherazo y un pase de la firma de mucho empaque. 'Rumboso', que así se llamó el toro, se abría en cada muletazo y repetía, echando la cara arriba en los embroques. Fandiño le cuajó tres series en redondo muy limpias, especialmente buena la tercera, iniciada con el pase de las flores y cerrada con el de la firma. Después vinieron cinco molinetes engarzados, cargando la suerte, rematados con el de pecho. Se alargó la faena buscando el indulto, pedido con fuerza por el público, y le cayeron los dos avisos, el primero toreando y el segundo al pinchar en dos ocasiones antes de la estocada. Incomprensiblemente luego no se pidió la vuelta al ruedo del toro en el arrastre. Desorejó al quinto, un colorao que se dejó torear. Lo saludó con lances a pies juntos rematados en el centro del anillo con la media. Brindó al público y la faena tuvo buenos momentos al natural, atacando al final el torero, poniendo emoción al trasteo. Tras un pinchazo, mató de entera.
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