Francisco Palha y Leonardo Hernández triunfan con los de Millares en Cáceres

Por José María Martín.

PLAZA DE TOROS “ERA DE LOS MARTIRES” DE CACERES

Foto Frak Martín

Corrida de Rejones, 1ª de abono de las fiestas de San Fernando 2013.

Un cuarto de entrada en tarde soleada, y agradable.

Toros de D. Manuel Ángel Millares. Correctos de presentación, mansearon en su conjunto. El primero de la tarde fue devuelto tras inutilizarse para la lidia.

Andy Cartagena: Silencio y Oreja.

Leonardo Hernández: 2 Orejas y ovación.

Francisco Palha: Oreja y 2 Orejas. 

Entretenido festejo, el celebrado esta tarde en el coso de la “Era de los Mártires” de la capital cacereña, dónde hemos visto la verdadera competencia de quienes quieren ocupar el cetro del rejoneo.

Abría cartel Andy Cartagena, que tuvo que parar a dos oponentes tras salir descoordinado el primero de la tarde. Con el sobrero, tras pararlo con “Cuco”, la labor del rejoneador alicantino se vio lastrada por el poco celo del astado y su acusada querencia a tablas. No obstante se vieron compases de interés a lomos de “Cañero”, realizando batidas de pitón a rabo. Después de dos pinchazos, clavó el rejón de muerte y fue silenciado.

Fue en el cuarto dónde Andy realizó lo más destacado de su actuación. En banderillas a lomo de “Magno”, buscó el pitón contrario del astado con temple y gusto, y sobretodo con “Pericalvo”, ese precioso lusitano de capa negra, que con su peculiar balanceo, encendió los tendidos. Después de pinchar repetidamente fue obsequiado con una oreja por el público cacereño, que premiaba así la labor de Cartagena durante toda la tarde.

No echó de menos Leonardo Hdez. a sus caballos estrella, que siguen inmovilizados en México. Ante el segundo de la tarde, después de pararlo, doblándose con maestría con “Campino”, la virtud del extremeño radicó en encelar al astado, que como toda la corrida manseó, logrando subir la temperatura de la faena, a lomos de “Olé”, batiendo a muy larga distancia, para después quebrar en la corta, y clavar con acierto, no faltando los adornos al final del trasteo, agarrando los pitones de su oponente. Después de matar al primer intento fue premiado con las dos orejas.

En el segundo de su lote, la labor de Leonardo se vió condicionada por el burraco que salió en quinto lugar, que además de ser tardo en la embestida, llegó hasta incluso echarse a mediados de faena. Aún así el extremeño no dejó de intentarlo, galopando a dos pistas y toreando de frente. Con el rejón de muerte tras acertar a la primera, fue ovacionado.

Cerraba cartel el rejoneador lusitano afincado en Sevilla Francisco Palha. Y se vió que vino a Cáceres, a demostrar que quiere ser uno de los mandones de éste escalafón. Si bien en su primero sacó a relucir la línea más clásica y sobria de la escuela lusa, por lo que fue premiado con un apéndice, en el que cerraba el festejo, sacó la parte más espectacular, dónde después de brindar a sus dos compañeros de cártel, y parar al astado con “Brickabrack”, logró encandilar al publico cacereño a lomos de “Oro”, un precioso bayo, que galopa a dos pistas de manera prodigiosa, dejando llegar al toro hasta el punto de ser atropellado en un par de ocasiones. Con el rejón de muerte se mostró seguro y fue premiado con las dos orejas.