Estamos salvados. Los jeques llegan al toreo

Si nos lo encontramos, al del chandal negro digo,  en el terraplen de al lado de la plaza lo tomamos por un gorrilla y le damos un euro, y rexamos para que cuando volvamos encontremos el coche y el loro
Si lo vemos en una plaza de toros, nos lo imaginamos en los tendidos de sol y partidario de Oliva Soto por la linea de Paula, y esperamos que se eche a cantar por soleares en cuanto se estire el gitano.

Sin embargo nos cuentan que Saif bin Zayed Al Nahyan es un alto gerifalte en los Emiratos Árabes Unidos. Que está en el taco y que es un hombre fuerte del régimen





Nos siguen contando que ha andado con Leonardo Hernández en el campo, desentrañando el arte de Marialva, en la finca "El Hondillo" de Casatejada (Cáceres), y además nos dicen que no lo hace mal, que sus habilidades ecuestres son reseñables y que tiene valor para dejárselo venir al estribo.

El ojo que todo lo ve de Fran Martín lo vio en la plaza de toros de Plasencia, Leonardo le brindó un toro y sus ojos se iluminaros con shispitas de colores.

Nos dice Fran que no le parece una idea descabellada,  visto lo visto, y los generosos que resultan estos  jeques árabes cuando les da por algo, ahí están, sin ir más lejos, las locuras que se gastan  en el mundo de la pelotita.

Pues igual se aficionan y les da por torear a caballo, o apoderar, o gestionar plazas... o vaya usted a saber