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domingo, 28 de octubre de 2007

Barroso y Silvera triunfan en Trigueros

La terna onubense del cartel


Catorce orejas y un rabo en el festival en Trigueros.
Silvera , ante un gran Cuadri, y Barroso, ante un magnífico Prieto de la Cal, se reivindican en Trigueros.

Ficha. Tarde que empezó agradable de temperatura y acabo fría, lleno aparente en los tendidos, festival cuyos beneficios serán destinados a DIMIC y la Hermandad del Rocío de Trigueros. Se lidiaron tres novillos de Millares 1º, 4º y 7º, difíciles y complicados, uno de Cuadri, 2º bravo y noble, dos de Prieto de la Cal 3º y 6º, de excelente juego destacando el extraordinario tercero aplaudido en el arrastre, el quinto de Arucci que se dejó.
Diego Ventura, dos rejonazos sin soltar y descordó, dos Orejas, Silvera media al segundo intento dos orejas, Barroso estoconazo dos orejas y rabo. Luís Vilches dos orejas, Antonio José Blanco, estocada dos orejas, Pepe Doblado intento en falso y estocada dos orejas Manuel Jesús Pérez Mota Dos orejas.

Empezamos con turno de ruegos y preguntas ¿quien inventó lo de los siete toros en los festivales?, es una exageración, no tiene sentido, se hacen largos, tediosos aún en el triunfo, encarecen el festejo, provocan acabar a deshoras y no creemos que repercuta significativamente en taquilla. Rociana, Higuera y Trigueros se han sumado a esta moda de los macrofestivales. Nuestra petición es que se vuelva a la normalidad, seis toros seis, y marchando que es gerundio.
Entre las arrobadas de orejas que se han dado en la tarde de ayer en Trigueros nos quedamos con la rotundidad del toreo de Emilio Silvera ante un novillo, que por hechuras parecía toro y toro bonito, de Cuadri, noble pero exigente y que luego de rematar humillando en los burladeros y hacer buena pelea en varas, empezó de forma poco clara por el pitón izquierdo, la firmeza de Silvera, su facilidad a la hora de ver los toros, su sentido del temple y su enorme capacidad

Natural de Emilio Silvera
acomodaron la casta y mostraron la bravura del Cuadri que venía salpimentada con la fijeza de la casa. Tan a gusto estaba ante la cara del morlaco, que quizá le sobró alguna serie, quizá fueron el regalo para el hijo de Javier Morano, a quien le brindó el toro y que desde el cielo de los niños ángeles pudo disfrutar del toreo de un torero grande ante un toro bravo..
Triunfo importante, por que importante era el toro, el de Francisco Barroso en Trigueros, ¡que gran toro de Prieto de la Cal! que lamina la del burraco cinqueño, bajito de agujas, ojalado, parecía una portada de la Lidia de principios de siglo. Se desplazaba largo, embestía con todo, se quería comer la muleta, rebosaba bravura y se encontró a un gran Barroso que sigue creciéndose en la pelea, cuanto menos torea mejor lo hace, se reconcentra el gusto y el coraje y hasta en el manejo de la espada desmiente la escasez de festejos, bien con ambas manos, pero con la de los cortijos y los millones sublime, la muleta siempre en la cara del toro, sintiéndose torero y gritando que no se quiere, que no se puede, ir de esto sin cuajar un toro así en una plaza de tronío. Chicuelina de rodillas de barroso ante el ojalado de Prieto de la Cal
Ventura trajo una cuadra novel a Trigueros, No se nota por su extraordinaria doma y capacidad de trabajo, pero ante el rajadito novillo destacó en banderillas con un valiente caballo castaño de nombre Bogotá y un atlético alazano careto que atiende por Mexico, Campero su inicio de faena encelando al toro con el marsellés. Valiente el caballo Bogotá que Ventura presentó en Trigueros
Doblado no se acopló con el jabonero de Prieto de la Cal. Después de brindar a la matriarca de esa casa ganadera, donde su padre se crió y su abuelo sentó cátedra entre los mayorales del siglo pasado, la embestida con la cara alta del toro y sus dudas impidieron más lucimientos. Preciosa lámina la del jabonero que tocó en suerte a Doblado
Antonio José Blanco, mostró ganas y disposición ante un novillo de Arucci de buen son y que se desplazaba mejor por el pitón derecho. Antonio José Blanco ante el de Arucci
Pérez Mota y Vilches pecharon con dos toros de Millares complicados, que se paraban a medio viaje, protestaban, miraban, se defendían y daban tornillazos, dos regalitos sobre todo el que cerraba plaza aumentados además los problemas por las reacciones del toro provocadas por la insuficiente iluminación artificial. Con el cambio de hora a las siete oscurece y estuvimos en la portátil, instalada en las instalaciones de la cooperativa del campo San IAntonio Abad, hasta bien entrada la noche.







Vilches dejo contadas muestras de su torería

sábado, 27 de octubre de 2007

Litri y Javier Conde cortan sendos rabos en Higuera.






















Litri y Javier Conde cortan sendos rabos en Higuera.
El trigésimo noveno festival homenajeaba a Miguel Baez Espinola “Litri”
Mañana de muy buena temperatura, tres cuartos de la coqueta plaza de Higuera, Festival en pro de la cabalgata de reyes Magos y homenaje al “Litri” Se lidiaron siete novillos de diversas ganaderías con el siguiente orden, juego y resultado para el matador.
1ª) Juan Pedro Domecq manso y con poca fuerza, se rajó Luís Francisco Esplá Oreja
2º) Los Guateles Por error en chiqueros con poca fuerza pero noble Alejandro Esplá Dos Orejas
3ª) Millares, excelente presentación, difícil, aprendió pronto. Emilio Silvera Oreja
4ª) Luís Algarra, Bravito y con motor. Litri dos orejas y rabo
5ª) Zalduendo, chico, noble y bravo, premiado con la vuelta al ruedo Javier Conde Dos orejas y rabo
6ª) Diego Puerta. No molestó. Julio Benítez Dos orejas.
7ª) Jandilla, bravo y enrazado. Manolo Macias Palmas

El Tradicional festival de Higuera sigue siendo tradicional, se le cambió la fecha para adaptarse a los nuevos tiempos, se le ha cambiado la hora y se ha pasado a un sábado, pero sigue siendo tradicional. El cariño con que la familia Litri y Pedro Macias lo organizan se nota en el ambiente, cartel de viejas glorias, noveles y novilleros antiguos, los toreros casi dialogan con el público, el ganado viene escogido de lo hierros punteros, los matadores vienen con ganas de agradar y gustarse, en fin todo le da un aroma de fiesta entre amigos, este año dedicada a Miki que recibió presentes del alcalde de Higuera y brindis de sus compañeros de cartel
Hacía lustros que no veíamos a Esplá por nuestra tierra, el maestro alicantino está cono siempre, bullidor en los delantales en el capote, fácil en los tres pares de banderillas y listo con la muleta enseñando como el novillo se colaba por el izquierdo y sacando la única faena posible al hilo de las tablas. Muy en su papel de director de lidia anduvo raudo cuando el segundo cogió de mala manera al torilero.

Emilio Silvera dibujó el torero de capote en chicuelitas ajustadas y ganándole pasos al muy bien presentado toro de Millares, que luego a mitad de la faena de muleta hizo cosas feas y no rompía hacia delante. Firme el torero del Molino de la Vega
Poderoso y firme, técnico y campero fue el toreo del penúltimo Miguel Baez ante el de Algarra, buenas series por ambos pitones por lo que, después de una muy buena estocada, paseó el rabo en el día de su homenaje en este festival de tantos recuerdos, no obstante en esta plaza hizo su primer paseillo el dinástico diestro onubense.
Javier Conde es distinto, por eso tiene detractores acérrimos y partidarios fervorosos. Su toreo barroco y su especial forma de sentirse y ponerse delante del toro no pueden tapar para el buen aficionado al torero largo que hace un lustro lideró el escalafón. Sus últimas series fueron de una largura y un temple de escuela de toreros, estuvo en su salsa, almíbar decía al citar el malagueño, ante el dulce y repetidor Zalduendo, dos veces hizo parar a la banda de la plaza para deleitarse con la música callada de su torero, Inspirado, entonado y charlatán ante la cara del toro Javier Conde.
El Cordobés (para aclarar, Julio Benítez) toreó en terrenos de cercanías, en faena capicúa, pues empezó y terminó de rodillas, toreo fácil y sin abrochar los muletazos del torero de alternativado a principios de temporada en su tierra natal
Manolo Macias no se entendió con el bravo y picante Jandilla que le correspondió ¿No hubiera sido más a propósito, pregunto, para el onubense el eral de Los Guateles?, además recibió un golpe con la pala del pitón y nunca lo vio claro.
Alejandro Esplá lidio en segundo lugar por un error al enchiquerar o al dar salida al que toco, no en suerte, Se mostró en fase aprendizaje, el eral se le arrancaba largo y a mitad de viaje se frenaba, quizá por falta de temple, a pesar de lo cual demostró firmeza y ganas, lo propio de un novillero, buenos maestros no le va a faltar en esa casa con experiencia en la enseñanza de toreros.

Tradicional festival, con tradicional almuerzo preparado por ese magnifico anfitrión que es Miguel Baez Spuny donde solazarse y mantener las tradiciones.

jueves, 25 de octubre de 2007

El "Litri" en el festival de Higuera

Miguel Baez Espinola “Litri” homenajeado en el Festival de Higuera de la Sierra.
El festival celebra su trigésimo novena edición a las doce y media del sábado a favor de la cabalgata de reyes magos

Miguel en este festival de Higuera de la sierra se te homenajea por tus veinte años de alternativa. . ¿Te lo crees?
Ojú, como pasa el tiempo, me parece mentira y un logro llevar veinte años como matador de toros, han sido muchas satisfacciones y también alguna fatiga pero es para estar orgulloso ¿no?
¿Que significa el festival de Higuera de la Sierra para un Litri?
Es un acontecimiento, siempre ha estado vinculado a mi familia, siempre hemos echado una manita aunque hay que decir que toreros y ganaderos, sobre todo los ganaderos, se han volcado siempre con este festival. Además en esa plaza toreé por primera vez con público, aquí veía torear a mi padre y a los toreros de otras generaciones, este año, como todos, vamos a estar entre amigos, unos toreando y otros en el tendido, Emilio el maestro Espla, su hijo Javier, Manolo y Julio, luego comemos juntos y todo en un ambiente muy agradable y sencillo.
¿Y para Higuera, eres consciente de lo que supone?
Ya hay construido un asilo que en parte se debe al Padre Girón y al festival, ahora se trata de colaborar con la cabalgata de Reyes Magos, en lo taurino la afición de toda la Sierra de Huelva ha podido disfrutar de las primeras figuras, Curro, Aparicio, mi padre, Ponce, Camino… gracias a este festival. Posiblemente que el nombre de Higuera de la Sierra sea conocido se debe en parte al festival. Higuera le debe todo esto al Padre Francisco Girón
Nombres en el cartel Emilio Silvera. Con él aprendí a torear, mejor dicho el me enseño los principios del torero, no está en el lugar que se merece en la tauromaquia, pero él si sabe que es un gran torero y sabe donde está, un torero para toreros.
Javier Conde.
El genio, la improvisación, la alegría de ser torero
Manolo Macias
Es torero por afición, tiene más merito ponerse delante de un toro cuando se tiene un bufete de abogados a pleno rendimiento. Juntos aprendimos los fundamentos de esta profesión.
Julio Benítez
Un torero al que hay que esperar, tiene los genes de Benítez y eso es un grado en el toreo
El maestro Espla.
Torero de toreros, deja su maestría cada tarde, treinta años de alternativa y la misma afición y ganas de mejorar, además se le llama para cualquier festival y siempre responde, un lujo por que nose por que causa ha sido muy poco visto en Huelva.
Alejandro Espla
Será la novedad, también trae buena reata.
¿Miguel facilita a la hora de confeccionar los carteles el cariño que os dispensa el escalafón?
Imagino que sí, está claro que depende quien llama a para que te sientas más o menos comprometido, esa labor la hacía mi padre, ahora entre Pedro Macias y yo hemos tomado un poco el testigo
¿Como se consigue esa unanimidad en el aprecio?
Yo lo he tenido fácil, he tenido el espejo de mi padre, su personalidad, su hombría de bien y su gran corazón, Siempre he intentado imitarlo en todo, como torero y como persona, ha sido un número uno, Es verdad que por todos lados por donde he ido sólo he oído cosas positivas tanto entre la gente del toro como aficionados y prensa.
Maestro, suerte en el festival
Gracias, el éxito será que la plaza se llene, por nuestra parte no va a quedar, ya hay una parte de triunfo conseguido con el magnífico cartel, por lo demás intentaremos divertirnos y divertir a todos.

martes, 23 de octubre de 2007

117 años bautizando bravura en "la Torre"





HERRADERO EN LA GANADERIA DE GUILLERMO ACOSTA
117 AÑOS BAUTIZANDO BRAVURA EN LA DEHESA “LA TORRE”
A pesar de la aversión enfermiza que por la vida social padezco, no puedo evitar acudir a bodas bautizos y comuniones. Últimamente observo que los bautizos se han convertido en acontecimientos sociales con fiestas desproporcionadas, ágapes interminables, galas inverosímiles, incluso en alguno me consta que existe una lista de bautizo o cuenta corriente ad hoc.
En las ganaderías de bravo, una vez clausurado el año ganadero el 30 de Junio y pasados los calores estivales comienza el recuento y la presentación en sociedad de los chotos nacidos en su mayoría durante la primavera, este bautizo, con inclusión en los libros sagrados de la ganadería consiste en esta casa de Guillermo Acosta en una ceremonia sencilla, sin más invitados que la familia y aquellos que van a trabajar, en fin un rito al antiguo modo, sin alharacas ni galas innecesarias, se cristiana a la antigua manera, sin hacer ascos a los avances que facilitan y evitan riesgos en la labor, una faena campera ancestral, primer contacto del ganado bravo con los corrales, la burocracia, la sanidad, y en definitiva con ese amigo mortal y acérrimo cual es el hombre.

Todo comienza el día anterior, cuando sin prisa pero sin pausa se encierra a los becerros en el cercado que está más próximo a los corrales, donde se ha colocado el mueco para la labor del día siguiente.
Gracias a la experiencia y las magnificas instalaciones para el manejo del ganado bravo que posee la finca, la mayoría de los noveles se aparta sin mucha brega, pero siempre existen unos cuantos que se niegan a abandonar a la vaca madre, o que una vez separados buscan o hacen portillos por donde volver al calor materno. Entonces es cuando la labor del vaquero se hace fundamental. Hasta hace poco a caballo, ahora, ante la escasez de hombres de campo, en palabras de Victorino Martín Andrés, ayudados por todoterrenos, agallas y conocimiento de los terrenos y las querencias, se trata de separar a dos animales bravos que se dejan la vida en el empeño de seguir juntos. Es curioso ver correr a la collera madre-hijo hasta el agotamiento, es entonces cuando el amor de madre se muestra en forma de bravura y la vaca se revuelve contra todo lo que ve, caballo, coche o alambrada. Pero la guerra está perdida desde hace siglos y el hombre vence por agotamiento y conocimiento del instinto, el becerro saca casta y arremete, está agotado por las carreras y de repente se ve rodeado por dos fuertes brazos que con seguridad y velocidad pasmosas lo tumban, lo empiolan y llevan con sus colegas de camada.
Atardece en rojo en “La Torre”, la magnífica finca donde la familia Acosta cría y mima la bravura, cuando se acaba la faena, la dehesa es un valle de mugidos de plañideras madres que claman por la presencia de aquel que llevaron en su seno y han defendido en los cercados con admirable instinto. Desde el cercado la respuesta partiría el corazón de cualquiera, la piara de becerros es un clamor, se encuentran desorientados y hambrientos, es el primer día de guardería para estos aprendices de toro que durante cuatro años serán los señores de esta dehesa situada a un tiro de piedra de Huelva, en término de San Juan del Puerto y en ese triángulo de la bravura situado entre Trigueros, el propio San Juan y Gibraleón.
Lenta y cadenciosa es la secular tarea
Por la mañana del día del herradero todo es actividad, el ganadero distribuye medios y funciones con precisión y sencillez, cada cual tiene una misión. Se respira aire con aroma vetusto y recio, como las instalaciones de la finca. Se han unido algunos amigos y aficionados a la plantilla que habitualmente trabaja en la explotación. Cuatro en los pasillos que separan los corrales para manejar el ganado, largas y bastas garrochas los ayudan en la tarea, al lado del mueco un hombre se encarga del fuego para los hierros, tres más enmuecando al becerro, Inma la veterinaria con sus avios de vacunar, su cuaderno de campo y su libreta de control, José Bueno a los fogones, el ganadero también con su libreta casando números con nombres y crotales. Lento es el trasiego, las prisas en el toro son para los malos toreros y los malos ganaderos, el trabajo es concienzudo y despacioso, se corralea al ganado hasta apartarlos y que entren al cajón de herrar uno a uno, una vez en el cepo se marcan a fuego en el lado derecho del animal con cuatro cuños: la U de la Unión de Criadores de Toros de Lidia en el anca derecha, en los costillares el número de de orden de la ganadería, las hembras correlativas desde las 290 en que se finalizó el año pasado, los machos empezando por el uno, en la paletilla el guarismo 7, correspondiente al año ganadero en que nació, una imposición legal desde los años 60, promovida desde la prensa por el maestro Navalón, para evitar fraudes, y por último en la pata, debajo de la U, el hierro de la ganadería. En lugar de las aguas del Jordan, es otro de los cuatro elementos esenciales para los griegos, el fuego, el que sirve para esta solemnidad inciática, fuego que traslada el hierro a la piel del becerro, Se canta el número de crotal y se casa con el marcado en las espaldas. Ya está bautizado de forma indeleble, se aprovecha el manejo para vacunar y sanear al ganado, se le hace la señal de oreja, se quita el crotal, se le corta el rabo para que la identificación sea más fácil en el campo, se ayuda con spray cicatrizante a cauterizar las heridas y se le vuelve a dar libertad a la pradera donde le esperan sus quintos.
El año no ha sido pródiga la paridera, de las ciento tres vacas de encaste propio en edad de madrear que pastan el “La Torre”, sólo setenta becerros han llegado a este primer proceso de la cría y selección del toro de lidia. De las seis docenas el ganado femenino es mayoritario. Es fácil hacer cuentas: treinta machos, entre accidentes, enfermedades, y taras diversas llegaran a la edad adulta en torno a veinticuatro, cuatro encierros justos de esta ganadería donde el representante, Marcelino Acosta, puede llevar de verdad las reatas en la cabeza.
El trabajo se alarga hasta que el sol ha pasado con mucho el mediodía, algunos animales reticentes a entrar en la mangada se hierran a la manera tradicional, se agarra con ellos un mozo bravo que los prende por la testuz, otros ayudan volteándolo por las patas y con el animal en el suelo y tres hombres sujetándolo, se le aplican los hierros candentes y el resto de procesos, el trabajo así hecho es penoso y el riesgo de accidentes, tanto para los vaqueros como para el ganado, se multiplica en proporción geométrica, pero esta añeja casa ganadera que es celosa guardiana de las antiguas formas, demuestra así que conoce los dictados de la tradición.
Reponiendo fuerzas y gozando la dehesa
Olor a pelo quemado en el ambiente, solera en las voces que cantan números y nombres, se acaba de aviar el último animal con la satisfacción que produce saber que se ha dado cumplida cuenta de una faena del campo bravo que en esta misma dehesa y de forma ininterrumpida se ha venido haciendo por esta familia Acosta Garrido al menos los últimos ciento diecisiete años. Sin parafernalias, como los cristianos viejos que consagran a los vástagos de la familia, se pasa a degustar comida campera, unas sopas de pan que resucitan a un muerto y una caldereta con carne de ternera de lidia que el cocinero ha tenido a punto para el momento exacto. El almuerzo es tranquilo como toda la jornada, la conversación amena, la compañía inmejorable, la sobremesa se prolonga.
En el cercado de los corrales braman todavía nerviosos y con la mosca de este caluroso mes de octubre detrás de la oreja, los recién llegados a la ganadería de bravo, una guitarra se templa al oído de Alberto Pulido, desde el porche de la vieja casa ganadera Contra el horizonte, y con los edificios de la capital como fondo, los erales pastan en el barbecho de la campiña de esta más que secular fabrica de bravura.
El ganadero, caballero de negra montura, campea entre los Benítez Cubero. Silencio y despaciosidad en el andar de los caballos. El mosquero de la jaca es metáfora del equilibrio, la cadencia y despaciosidad con que se van a criar los añojos durante los próximos cuatro años. Luego…sólo Dios sabe luego cual será el destino del cardenito dolorido y bravo herrado con el 44 que sigue mugiendo penas de ausencia en “la Torre”.

martes, 16 de octubre de 2007

Triunfal festival en Almonte

Triunfal festival en Almonte.
Doce orejas y cuatro rabos se repartieron los actuantes.
Ficha. Festival con picadores en beneficio de los enfermos de alzheimer y Caritas de Almonte. Se homenajeo a Fermín Bohórquez escribano Tarde de buena temperatura, lleno en los tendidos. Un eral de Fermin Bohórquez parado. Cinco novillos de Santiago Domecq de excelente presentación, agradable cara y colaboradores; destacó el sexto. Bohórquez padre e hijo por colleras dos orejas y rabo José Antonio Campuzano dos Orejas Ortega Cano dos orejas. Davila Miura dos orejas y rabo, El Juli dos orejas y rabo y Miguel Ángel Delgado dos orejas y rabo
Magnifica tarde de toros en Almonte, ya sabemos lo que es un festival pero en este se dieron todas las circunstancias para el lucimiento de los espadas el divertimiento del público y la obra social que nos consta recibe los beneficios con pulcritud y prodigalidad.
Todo empezó viendo torear a caballo a Fermín Bohórquez Escribano con setenta y cuatro primaveras, alma mater otros años de este festival ya tradicional. Su hijo, al alimón le amparaba y aunque el eralito de la casa se mostró poco colaborador el maestro se atrevió incluso con banderillas cortas y entró matar antes que el vástago lo finiquitará de un rápido meteysaca. Emocionante la vuelta al ruedo de ambos paseando el rabo.

José Antonio Campuzano demostró ante su aplicado alumno Sebastián Castella, que observaba atento desde el tendido, por que fue líder del escalafón en los ochenta, un sentido poderoso del torero, acompañado de estética y sentimiento que tuvieron su cenit en una serie majestuosa con la izquierda, sabores de otra época, solera de buen torero y honradez a carta cabal. Cinco Campuzanos lo saborearon en Almonte, el maestro Tomas, Enrique, Javier y el picador Enrique.

Ortega Cano se llevó una voltereta del tercero de la tarde, cayó de mala manera pero todo quedo en un susto. El público estuvo cariñoso con el de Cartagena y lo premió con dos orejas tras liquidar a su enemigo de un pinchazo hondo.
Davila nos sigue demostrando que tiene un toreo de muchos quilates y parece más poderoso y reposado desde que se retiró. Es el segundo festival que le vemos después de Alonso y nos sigue enganchando, toreando ceñido, pudiéndole a su enemigo, gustándose, además recetó la estocada de la tarde y cortó el primer rabo de los de a pie.
El Juli se encontró con el único novillo de la tarde que desarrollo peligro, dando tornillazos al final de cada embestida. Lo sometió, fue un prodigio de dominio, de poderle al toro, de tapar sus defectos y aprovechar las virtudes, toreo para aficionados, una lección de toque y mando, sin aspavientos, una delicia ver a un mandón del torero en plenitud aunque sea en un festival. Este año habrá que ir a Aracena para verlo vestido de luces, puesto que no viene a Colombinas.

Buen sabor de boca dejó el joven y prometedor ecijano que cerraba plaza, este Miguel Ángel Delgado alumno de Pepe Luís Vargas en la escuela taurina de su pueblo e hijo de banderillero colocado con Castella, demostró que el Francés es el espejo donde se mira, comenzó la faena con el típico pase cambiado de la casa y esbozó un concepto clásico del toreo en las ceñidas verónicas de recibo y las apretadas chicuelinas del quite. Manoletinas y molinetes de postre lo mostraron en su sitio de novillero peleón.
Cuando tras casi tres horas de espectáculo nadie se ha aburrido es que hemos asistido a una más que agradable tarde de toros en el ya tradicional festival de Almonte. Y que sean muchos más.

JUAN ANTONIO CARBONELL










JUAN ANTONIO CARBONELL
MIDIENDO BRAVURAS EN LA PIEL DE TORO.
ES PICADOR DE LA CUADRILLA DE SALVADOR CORTES.


En esto del toro pocos están donde soñaron en sus principios. La gran mayoría de los banderilleros intentaron ser toreros, casi todos guardan un cartel donde su nombre brilla al lado de alguna figura y el nombre de su terruño. Un muy alto porcentaje de los matadores creen merecer un lugar de más alto reconocimiento en el Cossio y en el escalafón. Mozos de espada, apoderados, ayudas, veedores, capitalistas, empresarios, periodistas, incluso muchos aficionados no sueñan, no soñamos (aclaro), otra cosa que vestirse de luces y pasarse un toro por la taleguilla ante diez mil personas, “aunque sea una vez en la vida”.

Ellos no. Son de una raza especial. Son lo que siempre han querido ser, picadores de toros bravos. Visten de oro, callan con el silencio de los sabios y hablan con la cadencia de los místicos, una “rara avis” del mundo del toro Ellos nacieron encima de un caballo, mamaron el mismo calostro que el ganado bravo, ayudaron a parir a alguna vaca el becerro que después vieron hacerse toro y acabaron picando.

Juan Antonio Carbonell no puede recordar la primera que cayo a horcajadas sobre el lomo de un caballo, sus primeros recuerdos se mezclan con los de su padre y en la nebulosa lo recuerda vestido de monosabio en la Maestranza. No puede olvidar los primeros paseillos en la Merced ejerciendo de aguacillo, impúber y nervioso. El salto a picar toros era casi una obligación, tentó pronto en el campo, conoció querencias, adquirió maneras, templó nervios y comprendió que su trabajo siempre es para otro: hay que enseñar el toro al ganadero, que lo vea, que descubra mansedumbres y perciba la bravura, que “cante la gallina”, que sepa hacer ver cuando la becerra va de mentira y se duerme en el peto o cuando aunque es tarda es fija y enrazada, esperar paciente por que lo de este encaste se viene arriba a partir de la segunda vara. Se hizo un profesional y pronto fue reclamado por los toreros de la tierra, Barroso, Silvera.

Hace varias temporadas dio el salto de calidad y se enroló en las filas de un joven novillero sevillano, hijo de Luís Mariscal, que apuntaba maneras y dio un aldabonazo en Sevilla el día de su alternativa, que confirmo semanas después en el Corpus. Tardó en romper este Salvador Cortés pero por la vía de las sustituciones en principio y a base de aldabonazos en plazas de prestigio se consolidó como una figura del escalafón. El éxito del matador fue el éxito de la cuadrilla y su prestigio fue en aumento, después de dar dos vueltas a la piel de toro, toreando con las primeras figuras a quien, como no puede ser de otra forma, acompañan los primeros palos de entre los varilargueros, se ha consolidado este excelente remontista como un picador seguro, sobrio, largo y profesional. Mete a los toros en las cuerdas sin alharacas, no tiene que rectificar y si lo hace no lo enseña, ahorma la embestida con mano de seda y para la agresividad con guante de acero.
Cruzando España del Odiel al Ebro.
Esta semana hemos gozado del placer de acompañar a esta gran familia trashumante que es la cuadrilla del Matador Hispalense Salvador Cortés. En la mañana del sábado ha picado en la ganadería de Manuel Ángel Millares, tras breve siesta en su casa panturrana, marcha en su propio coche a casa del matador donde la madre del torero ha preparado una merienda consistente: pescado frito y otras ricas viandas que el grupo disfruta con fruición. El coche cuadrilla es un abigarrado universo móvil. Chofer, mozo de espadas, el padre del matador, ayuda, tres banderilleros, dos picadores y un curioso personaje de la ciudad de la Alambra, Antonio Haro, un partidario que diría el clásico, que acompaña en esta singladura a nuestros protagonistas. Esta cuadrilla es joven y sencilla, la unen fuertes lazos familiares, tíos sobrinos y amigos íntimos, cuadrilla sana y de amistad sincera, donde dejó poso también otro onubense como es Raúl Corralejo, miembro de ella hasta hace unos meses.
Ruta de la Plata adelante marcha al norte, tres literas donde en constante duermevela reposan por turnos en una taurina forma de camas calientes, el resto, charla variada desde el fútbol a los toros pasando por la política, la radio de fondo para cubrir silencios y tapar cabezadas. Paradas calculadas y mil veces reiteradas, donde son bien recibidos por aficionados y donde estirar las piernas y disfrutar del buen yantar y vuelta al coche: Carretera y Manta
Llegada matutina a Pamplona, la cuadrilla quiere correr el encierro pero sólo lo hace el matador acompañado de su hermano, Luís Mariscal, que lo acompaña como lidiador. El día lo ocupan entre la obligada inspección a los Corrales del Gas, visita a la plaza, la comida, la bendita siesta y acudir a la corrida pamplonica como espectadores de miedos ajenos. La cena en cuadrilla es frugal, algo ligero y mucha “Coca Ccola Light” la docena de hombres del toro conversan, bromean y se retiran pronto .David un monstruo de la logística ha preparado todo Los picadores duermen con el tercero, los lidiadores juntos, el matador con su padre, mozo de espadas y ayuda, chofer y apoderado en otra habitación.

La mañana de la corrida está llena de costumbres, ritos y tradiciones, amanecer ni tarde ni temprano, paseo largo hasta los corrales de la plaza, solo un lidiador entra a enlotar, Mientras Carbonell y Agustín Panduro ven la cuadra de picar, ya la conocen, no en vano torean mucho por el Norte, ponderan pesos, descubren carácter y eligen caballos, por un momento más parecen chalanes que picadores. Hacer lotes de toros leva su tiempo, un detalle desnivela la balanza, un derrote clasifica, una mirada cómplice es un tratado de tauromaquia. Conocen las reatas, separan los hermanos, los pelos, lo tipos, …una labor de peritos en pormenores. Papeles al sombrero del mayoral de FuenteYmbro y la suerte está echada. El sorteo depara el 24 y el 116 uno grande fuerte y con cara y otro más bonito, los picadores como hombres de campo y conocedores del ganado bravo, llevan a cabo una labor importante Juan Antonio y Agustín son consultados, “echa al 24 por delante”, charlan con las cuadrillas de los otros matadores de la tarde, gestos solemnes, caras afiladas, ya están en capilla. Vuelta al hotel, información al matador del sorteo y frugal comida en tensión. La temporada no va bien, no hubo suerte en Sevilla ni en Madrid, la cuadrilla sabe de la importancia de esta corrida con las cámaras de televisión para toda España, la responsabilidad provoca silencios.. Nuestro protagonista se empieza a vestir a las cinco, el rito de los ritos, se ayuda con el otro picador, todo es parsimonioso, ritual, bellísimo, chaquetilla turquesa y oro, la de las ocasiones importantes. Siguen los comentarios breves, los justos, se hablan entre las habitaciones para bajar juntos y suben a la furgoneta cariacontecidos.
Pamplona es una fiesta, en el trayecto se oye a las peñas con sus charangas. Se dan ánimos entre ellos, la boca seca y los nervios a flor de piel. Cierran cartel, hay que esperar dos toros, en los que no pasa nada importante, hasta que sale el tercero, que corresponde en suerte picar a Carbonell que espera caballero de caballo cruzado en el patio de cuadrillas viendo los primeros pasos del toro en el ruedo, intentando descubrir querencias y derrotes del burel, después de los lances de recibo sale al ruedo, la plaza es un jolgorio pero Juan Antonio va concentrado, le enseña el pecho al toro que se arranca presto y lo pica con conocimiento, en el sitio justo, para ahormar la embestida, descolgarlo y frenar sus impulsos, lo vuelven a poner en suerte y remata la faena dándole lo justo. Descabalga en el patio de cuadrillas y quiere volver al callejón por que sabe que hay material para que el torero de la vuelta a la tortilla de la temporada. Y tanto, dos orejas clamorosas paseará el matador. Nuestro amigo está eufórico, no aparecerá en ninguna portada pero el se sabe. lo sabemos, protagonista máximo de lo que sucedió en el coso de la misericordia.
Tras cortar otra oreja Cortés sale a hombros, el peregrinar hasta la furgoneta es una locura, la vuelta al hotel es un clamor, Antonio Haro llora, la cuadrilla está eufórica, la tarde se redondea cuando la empresa les ofrece la sustitución de El Fandi para dos días después. En la cena posterior hay incluso alguna copa. Misión cumplida.

Nos separamos del joven picador, formal, campero, familiar y grave. Si la juventud es una enfermedad que se cura con el tiempo, el la ha padecido de forma leve, su madurez asombra y sus veintiocho años vaticinan un lugar destacado entre los otros hombres de oro.

domingo, 14 de octubre de 2007

Magnifico Festival taurino el domingo 28 en Trigueros

Magnifico Festival taurino el domingo 28 en Trigueros
Por fin fumata blanca en Trigueros. Ya hay cartel para el ya tradicional festival con motivo de la feria de Trigueros y que tan importante fue en su día para la realización de las obras del asilo felizmente finalizado. Este año se celebrará a beneficio de las obras de la Casa de la Hermandad del Rocío de Trigueros y de la asociación DIMIC
La característica fundamental del presente año es el onubensismo tanto en el aspecto ganadero, donde se confirma el ganado de Manuel Ángel Millares y Prieto de la Cal por partida doble y Cuadri, como en el de matadores, donde se encartelan juntos por primera vez los matadores onubenses Emilio Silvera, Francisco Barroso y José Doblado. A falta de confirmarse un par de ganaderías que se sumaran a las ya mencionadas y que serán lidiadas además de los mencionados por el caballero Diego Ventura, y los matadores Luís Vilches, Salvador Vega y Manuel Jesús Pérez Mota.
Magnífico festival el confeccionado por la comisión habida cuenta de las dificultades que nos consta se encuentran a estas alturas de la temporada para pertrechar un cartel interesante como el que finalmente será presentado el próximo viernes 19 en el centro cívico “Convento del Carmen” .
El magnífico plantel de toreros de la tierra alternará con toreros del gusto de los buenos catadores del buen toreo como el utrerano Vilches, el malagueño Vega o el gaditano Pérez Mota junto al aspirante al mando del rejoneo como el luso Ventura
Sin lugar a dudas una cita ineludible para los aficionados de la provincia la del domingo 28 a las cuatro y media de la tarde en la plaza portátil instalada en el recinto de la cooperativa del campo de San isidro Labrador de trigueros

martes, 9 de octubre de 2007

Raúl Corralejo. Uno de los buenos

Raúl Corralejo. El coraje de querer ser torero
El banderillero de San Juan se recupera de la grave cogida de Collado Villaba.
Cormac McCarthy, reciente premio Pulitzer en su último libro traducido al español,”La Carretera”, plantea un sobrecogedor panorama donde un hombre y su pequeño, de edad indeterminada, pululan a lo largo de una carretera en un medio ambiente hostil por las consecuencias de la explosión de una bomba de vacío o similar. Si el ambiente es difícil las relaciones con el resto de supervivientes son aún peores, asesinatos, antropofagia, canibalismo y robo son las leyes de ese mundo nuevo. En esa tesitura y ante cada nuevo revés del destino o sorprendente aberración que ven los infantiles ojos del hijo éste repite una pregunta simbólica y percutiente “Papa, ¿nosotros seguimos siendo los buenos?”.
Imagino que el torero Raúl Corralejo, como tantos otros hombres del toro, se puede haber planteado esta pregunta muchas veces durante su intensa vida en el toro. Después de nacer en Valverde del camino y pasar su infancia en Nerva donde su abuelo, rondeño de nacimiento, le inculca el amor al toro bravo, viene a San Juan del Puerto y empieza muy joven a querer ser matador de toros. Fue alumno aventajado de la escuela taurina de Huelva. Su progresión fue llamativa y por su afición, sus conocimientos y su privilegiado físico, parecía que acabaría en figura del escalafón. La dificultad intrínseca de la profesión, los sinsabores del toro, la falta de oportunidades, las malas experiencias con algún empresario sin escrúpulos y su seriedad acabaron sesgando una trayectoria que merecía haber sido más brillante como matador.
Siempre me ha interesado como curioso de todo lo que rodea al mundo del toro el momento en que un novillero decide coger los palos. La decisión no debe ser fácil, una renuncia de carácter burocrático que sin duda tiene aspectos que dan mucho juego literario: cambiar el oro por la plata, sueños frustrados, renunciar a la gloria por un plato de lentejas, una triste mañana de invierno en las oficinas de una asociación sindical cambiando el carné que algún día enseñará a sus nietos…., Lo de Raúl fue mucho más terrenal y espontáneo, un amigo le pidió el favor y cambió los papeles, quería seguir vinculado a este mundo que era su mundo y por eso la única opción era hacerse profesional. No aparece en su recuerdo la palabra frustración, el recuerdo ingrato o la sensación de injusticia, no pudo ser y no fue.
Importante hombre de plata
Después de placearse con unos inicios prometedores acompañando a matadores y novilleros de poco recorrido en cuanto a número de festejos toreados, hace seis años le paso por delante un tren que llevaba a una estación grande, de muchas corridas y plazas importantes. Se enroló en la cuadrilla del entonces novillero Salvador Cortes, con el anduvo tres temporadas de novillero, toreó su alternativa y paso el bache de la falta de contratos a pesar de los triunfos. De repente todo cambió, se enderezó la temporada 2005, y vivió la fulgurante del 2.006 para el matador del Aljarafe, con cuatro orejas en la Maestranza de Sevilla como hito más brillante. Vuelta a España, muescas en su capote con el nombre de todas las plazas de primera, el Coso de la Misericordia, Vistalegre, Las Ventas, La Monumental de Barcelona, la Malagueta…
Recibe ofertas de matadores de tronío con dineros importantes pero su sentido de la lealtad y su fe en las personas le hacen permanecer al lado de Cortes. En el invierno, con las cuadrillas ya apalabradas y los mejores sitios ocupados, el matador le comunica de forma abrupta que se queda en el paro. La situación es difícil, había abandonado sus otras ocupaciones, tiene una familia que mantener y no hay tiempo de reacción. Se preguntaría otra vez entonces como el protagonista de “la Carretera” ¿verdad que seguimos siendo de los buenos?
Como profesional respetado y placeado no le faltan contratos pero sin la continuidad necesaria para poder vivir de esto. El futuro le dio salida con un pase cambiado por abajo, el líder del escalafón se interesa por el onubense ante una falta en su cuadrilla y se coloca en el mes de Mayo con Manuel Díaz “el Cordobés”.
Cuando llamas al teléfono de Raúl, te entretiene la melodía de “Verano Azul”, ese era el verano que todos le augurábamos al bueno de Corralejo. Dicen los profesionales cuando van con una figura “este es el toreo, el toro chico y el dinero grande” este era su verano azul, un matador que va a andar cerca de torear el centenar de corridas, una cuadrilla que es una piña, un entorno que es una balsa, ganado del que buscan las figuras, el público siempre a favor: Jauja. Tan puesto estaba que sabemos de algún ganadero que lo llamaba para tentar en el campo por su conocimiento y versatilidad, dejando a un lado a matadores de los primeros lugares del escalafón.
La cogida de Collado-Villaba
Y entonces…, Collado Villaba, una tarde más del largo peregrinar por la piel de toro, el quinto de la tarde de Buenavista, manso y reparado de la vista, a pesar del nombre de la ganadería, no obedeció al capote, viniéndose al cuerpo del banderillero, que sufrió un primer golpe muy fuerte y, una vez derribado, una tremenda paliza ya que le volvió a buscar en el suelo, cebándose con él la caída fue seca y dura golpeándose en la cabeza, el matador casi no reacciona. Los profesionales acuden al quite al percatarse de la gravedad del incidente. UCI del Puerta de Hierro, coma inducido, TAC, miedos, maldiciones, móviles que no callan y un torero que se va. Los días pasan, temor a las secuelas, temporada rota y otra vez la pregunta “¿seguimos siendo de los Buenos?”
Sin duda es de los buenos, de los bravos que se vienen arriba en la pelea y siempre van a más sin abrir la boca, por que de su boca no sale un agravio, un reproche para nadie.
Las televisiones, en su tratamiento habitual del mundo del toro, sólo se fijaron en la cogida que ese mismo día sufrió Cayetano Rivera Ordóñez, la recompensa le vino dada por un mundo del toro solidario y humano que se volcó con él salvo “honrosas” excepciones que Raúl calla. Manuel Díaz,, su matador, y toda la cuadrilla se convirtieron en parientes cercanos, en la larga sala de espera de la noche madrileña, apoderado, mozo de espadas, hombre de confianza fueron sus ángeles de la guardia hasta que llego su gente de San Juan. El proceso largo y tedioso hasta que se permitió el traslado a Huelva, Rocío, la sufridora en casa, padeció de soledad e incertidumbres en Madrid entre olores a cloroformo, radiografías, pruebas y analgésicos.
Sigue su recuperación callado, sólo algún quejido apagado de dolor cuando cada tarde acude a la clínica de fisioterapia de Huelva, de la Calle Isla Saltes del muy taurino barrio del matadero, donde pasa dos horas de un bendito tormento que le lleva de bruces a la reaparición en la próxima primavera. Su expresión es de valiente y promete “estar mejor que el que mejor esté” cuando empiece la temporada 2.008.
No nos cabe duda y sólo esperar que tenga la suerte que se merezca, que no será poca si el mundo del toro le devuelve una milésima parte de lo que Raúl le ha regalado.

Gabriel Picazo corta un rabo en Rociana.

Gabriel Picazo corta un rabo en Rociana.
Triunfo de Gabriel Picazo y Paco Barroso ante el ganado de Cochaysierra.
Ficha En tarde de agradable temperatura, algo calurosa al inicio del festejo, un cuarto de plaza, festejo suspendido el 25 de agosto por lluvia. Siete novillos de Conchaysierra de buena presentación y juego destacando quinto y sexto, este último premiado con la vuelta al ruedo.
A caballo Gerardo Trueba, que sustituía al lesionado Moreno Orenes, silencio tras un recital con los aceros.
A pie Emilio Silvera ovación, Luis de Pauloba silencio, “El Gino” Oreja, Francisco Barroso dos orejas Gabriel Picazo dos orejas y rabo y el novillero Emilio Martín silencio.
Destacaron en banderillas Carvajal y Leperito ante el mirón segundo. Se guardó un minuto de silencio en memoria de Odon Betanzos, hijo predilecto de Rociana del Condado.

La tarde que pudo ser y no fue en el mes de agosto se dio en este octubre de cambio climático y calores otoñales. Poco ambiente en la plaza, las razones muchas y diversas, jugaba el Recre con el Real Madrid, había toros en la tele, se abría la general en la cacería…, y al final ya saben que si en Madrid el torero que lleva más gente a los toros es San Isidro, en cualquier pueblo y en otra dimensión, fuera de feria es difícil llevar al público a los tendidos y Rociana no fue una excepción.
El legendario hierro de Conhaysierra cuya sangre y variedad genética el ganadero onubense José Luís García Palacios conserva aunque en línea paralela con una punta de ganado encaste Domecq, se dejaron en general pero presentaron dificultades que cada actuante resolvió como pudo y no siempre de la mejor manera.
Del mexicano Gerardo Trueba poco que decir salvo que no es quien mejor resolvió la papeleta del novillo que lidió, ni siquiera sacando un caballo castaño con el hierro de Pablo Hermoso de Mendoza enmendó una mala actuación que corroboro con el mal uso de los rejones de muerte.
Bien Silvera , en su línea, hizo parecer bueno a un toro reservón y probón; poderoso con la muleta en una faena desarrollada en el centro del ruedo y gustándose con el capote, mal con la espada lo que dejo el premio en una ovación.
Pauloba después de recibir con armonía y cadencia en los vuelos de su capote al cárdeno tercero, que en su pelo mostraba el encaste, no se acopló con la muleta y ante cada mirada del toro le dudaba y adoleció de un pasito, mal también con la espada.
El colombiano “ Gino” se mostró en el tono sudamericano, bullidor y variado con el capote, el toro protestón y exigente mostró las carencias y las ganas del torero que había brindado al maestro Víctor Puerto que se encontraba en la plaza.Tras estocada caída arrancó la primera oreja de la tarde.
La firmeza y el sentido de los tiempos y las distancias dieron un triunfo importante, de plaza grande, a Barroso ante el burraco que hacía de quinto, bien por ambos pitones, se pasó quizá un poco de faena y el toro acabo aprendiendo y buscando los tobillos. Dos orejas de peso para el choquero.
Siempre en estos casos la pregunta es obligada ¿tuvo suerte el torero con el mejor astado del encierro o cualquiera le hubiera servido al joven torero? La respuesta es que sin duda el sexto de la tarde y Gabriel Picazo dejaron los momentos más vibrantes de la tarde, su toreo con la mano izquierda, embarcando al buen novillo delante y dando una lección de suavidad y temple hasta soltarlo muy atrás fue lo mejor del festival. Tiene el madrileño un concepto y un sentido del torero que nos agradó en el primer festejo que le vemos, Brindó el toro a Luís de Pauloba y su rápido uso de la Tizona, le dio el único rabo de la tarde.
Emilio Martín torea poco y por eso quizá nos sorprendió en sus formas y facilidad de andar ante el que cerraba plaza. Tras una larga faena, el mitin que dio con los metales lo devolvieron al sitio de los novilleros que torean poco.
Acabó lo que empezó allá por el 25 de Agosto, se hizo largo pero no aburrido.

lunes, 1 de octubre de 2007

Omedetó Vivan los novios





















Omedetó Vivan los novios

Ayer un japonés llamado Taira Nono celebró por las calles de la vieja Onuba una ceremonia nupcial única, paseando junto a su desposada en jinrikisya , al grito de “Vivan los novios” “Omedetó” vestido con el tradicional Kimono. Luego se vistió de corto y toreó un añojo complicadito de Pereda, con maneras de novillero y afán de agradar al variopinto público que invitó a la ceremonia. Su esposa japonesa de nacimiento, cultura y vivencias tomo la tromba y nos deleito con un "Mi Huelva tiene una ría" único. Se brindó con Sake que regaba gambas y jabugo, se hablo en Japones y en castellano se oyeron fandangos y cantes sin compás.

Dos pueblos distintos por distantes se acercaron se comprendieron y se dieron lo mejor de sus culturas gracias al arrojo de un joven tokiota enamorado de la fiesta de los toros, de Huelva y de Chie a quien ayer juro amor eterno en una ceremonia de confraternización de todas sus inquietudes.

Los modernos antropólogos presentan la globalización como el proceso que posibilita romper las barreras políticas y geográficas, para unificar a la sociedad global de la denominada generación X o sociedad postindustrial. El desarrollo de la red de redes, la internacionalización del todo incluidas personas, además la posibilidad de internacionalizar la cultura en un mundo donde todos “respetamos” lo distinto, nos llevan a esa globalización de la nada, a respeto sin involucrarnos.

Ayer no era cuestión de globalización, sino de integración y mezcla de culturas. Taira Nono no respeta, ama hasta la locura la fiesta de los toros. El emperador japonés Motohide Yoshikawa no respeta el flamenco o los toros ayer en la peña flamenca de las Colonias lo sintió como un desgarro en su pecho oriental, tocando palmas y sintiendo el quejio como propio, hoy en la plaza de toros vivía cada pase de su compatriota como un lance de Sumo.

El onubense que ayer paseaba por la calle Concepción, se sentía atraido por esta cultura milenaria que hace que un hombre tire de una jinrikisya fabricada en Huelva, en un desfile nupcial sin precedentes, no respetaba, quería conocer y preguntaba, quería amar lo mismo que se amaban los desposados protagonistas.

Nuestro alcalde no respetaba, se involucraba y vivía el acontecimiento como una forma más de mostrar la cultura de un pueblo abierto como el onubense. Pueblo culto es aquel que acepta lo nuevo lo estudia y lo asimila si lo entiende potable.

Paró la comitiva a las puertas de la Concepción donde se celebraba una boda flamenca y ambas ceremonias no se respetaron, se fusionaron, se enriquecieron y se admiraron, en momentos únicos de mezcolanza.



Interculturalidad, bah... patraña de funcionario. Sentimiento, compromiso, historia, hitos., estas son las verdades. Una bandera nipona en la plaza de toros de la Merced, un Viva Huelva, un Viva Japón, un Viva España sin voz solista. Gritos de "torero, torero" Una lección de Don Antonio Cabezas, cuarenta años en el Imperio del Sol Naciente, los primeros luchadores de Sumo no orientales lo hicieron en 1611 en el Castillo de Edo ante el cacique nipón de la época, el barco lo mandaba un onubense que eligió a sus mejores hombres para este rito ancestral de noble lucha. Casualidades del destino, o quizá no existen las casualidades.












Toda Huelva se enriqueció ayer con la simbiosis de dos culturas que se fusionaron en torno al toro.