El Aula Joven clausura con un tentadero el I Curso de Toreo para Aficionados Prácticos

 El Aula Joven de la Merced ha clausurado hoy el I Curso de Aficionados Prácticos que ha venido celebrando desde el pasado 9 de febrero con una decena de clases teóricas en la Plaza de Toros La Merced y un tentadero como prueba final que se ha celebrado esta mañana en la ganadería de José Luis Pereda y La Dehesilla. Cuarenta aficionados prácticos, de los más de sesenta que han participado del curso, han probado hoy en el campo y ante las becerras los conocimientos que han ido adquiriendo bajo la guía como profesores de los banderilleros onubenses Manolo Contreras, Raúl Corralejo y Juan Cañaveral.

Jóvenes en su mayoría (aunque algún aficionado también de mayor edad pero del mismo ímpetu por torear), llegados de diversos puntos de la provincia de Huelva, que han compartido una experiencia única para ellos, ya que, en su mayor parte, era la primera vez que se ponían delante de las vacas bravas para sentir la magia única del toreo. El más joven (Rafael, de La Palma del Condado), de tan sólo nueve años. El más veterano (Juan Miguel, de Huelva), rozando los setenta. Entre ambos, toda una horquilla de edades, lo que prueba la vigencia maxima de la Tauromaquia cuando a la gente se le da la oportunidad se sentirse protagonista de ella. Han toreado hombres y mujeres. Algunos, con algo de rodaje ya. Otros, completamente de estreno. Pero todos han conseguido dar forma a una jornada inolvidable para ellos y para los organizadores, la empresa de la Plaza de Toros La Merced y la ganadería de José Luis Pereda y La Dehesilla.

En el tentadero han participado también los novilleros sin caballo onubenses David de Miranda, Alejandro Cunquero y Emilio Silvera. Ellos han sido los encargado de parar y de atemperar las embestidas de las becerras antes de que los alumnos salieran a torear. Lo han hecho en el estricto orden determinado por el sorteo previo, bolitas liadas en papel de tabaco incluido. Para que la liturgia fuera lo maxima posible.

Al término del tentadero, los aficionados practicos han recibido un diploma acreditativo de su participación en el curso y el agradecimiento del ganadero José Luis Pereda por la inquietud de todos ellos por formarse para ser cada vez mejores aficionados: “Es una gozada ver a tanto joven movido por el toreo, queriendo aprender, con tanta ilusion y respeto como lo han hecho todo. Mi casa siempre estará abierta para iniciativas así porque éste es el camino del futuro del toreo”.