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viernes, 15 de junio de 2012

¿Poetas o toreros? y por que no poetas y toreros


Colombia. El alcalde inculto de Bogotá cambia los toros por poetas, ¿Será memo?

Los toros de lidia no volverán a pisar la plaza de toros La Santamaría, como lo han hecho desde 1931; serán reemplazados por poetas y escritores. dijo Gustavo Petro que anunció que la plaza La Santamaría será usada para eventos culturales.

En diálogo con 'W Radio', Eduardo Noriega, secretario General de Bogotá, afirmó que la decisión del gobierno deistrital de suspender las corridas de toros de la plaza La Santamaría "tiene soporte constitucional, internacional, jurídico y filosófico".
Noriega afirmó que la decisión es una propuesta de campaña que contó con los votos de la ciudadanía y hace parte del Plan de Desarrollo.
Hizo énfasis en los tratados internacionales que prohíben el maltrato animal. "En el mundo, países que tienen más tradición taurina que nosotros (México y España, por ejemplo), la decisión ha sido la de prohibir las corridas", dijo Noriega.
El secretario General señaló que la decisión de suspender las corridas se apoyó en la sentencia de la Corte Constitucional.
La Santamaría ya no será para toros sino para poetas
Los toros de lidia no volverán a pisar la plaza de toros La Santamaría, como lo han hecho desde 1931; serán reemplazados por poetas y escritores.

Así lo dijo el miércoles el alcalde Gustavo Petro, quien explicó que, como "mandante del contrato", puede dejar de patrocinar el uso del lugar para lo que fue hecho, la fiesta brava. Dijo además que la plaza no es propiedad de la Corporación Taurina sino de la ciudad y que ante la negativa de esta de eliminar del espectáculo la muerte del toro de lidia, el Instituto de Recreación y Deporte (IDRD) recibiría nuevas disposiciones para el uso de la plaza.

Según un comunicado oficial, para eventos culturales y educativos, "hará parte del sistema de educación distrital, en el que los mejores poetas y escritores se reunirán con los estudiantes de nuestros colegios públicos para dictar clases de literatura y letras, haciendo parte de la cadena de establecimientos culturales y educativos", dice Petro.

Detrimento patrimonial

La reacción por parte de la Corporación Taurina no se hizo esperar. Según su gerente, Felipe Negret, la decisión no solo es una amenaza contra las libertades individuales sino que se cae en un "clarísimo" detrimento patrimonial.

"Hay un contrato de por medio. Las corridas de toros le generarían al Distrito, sumando los eventos de 2013, 2014 y 2015, unos 5.000 millones de pesos, los que la ciudad dejaría de recibir por las temporadas que no se realizarían", explicó.

Además, dijo que la medida demuestra que el alcalde "debe separar sus gustos personales (...) Está violando la imparcialidad que debe tener todo funcionario público. Él no está por encima de la ley. Tiene que gobernar como Alcalde y no como capataz", dijo Negret.

No obstante, la Corporación señaló que espera que recapacite y que, por ahora, se cumpla con el contrato firmado hasta el 31 de marzo de 2015. "Nosotros queremos hablar, las amenazas vienen de parte del Alcalde. Además, nosotros tenemos argumentos jurídicos para defender las corridas de toros y hacer uso de la plaza La Santamaría. Se deben acatar las sentencias de la Corte".

Respeto por las minorías

Aficionados y trabajadores de la fiesta brava dicen que el Distrito no ha tomado en cuenta que, con esta decisión, se pone en riesgo el futuro de unos 35.000 empleos que giran alrededor de esta actividad. Según Alfredo Bonilla, aficionado, se está violando el derecho a mantener una tradición cultural que ha crecido con la ciudad. "La gente se movilizaba en torno a las corridas en La Santamaría", asegura.

Otros, como Hernando Franco, banderillero, temen perder el trabajo con el que sostienen sus familias: "Que el Alcalde me diga de qué voy a vivir de ahora en adelante".
'Que prohíban también el fútbol'
Una de las defensas de los taurinos es que si el argumento del Alcalde es el de terminar con la violencia en los escenarios públicos, también se debería acabar con el fútbol. "En los partidos hay seres humanos asesinados", dijo Hernando Franco, aficionado.

Los defensores de animales, por su parte, se movilizarán por la abolición de las corridas el 25 de junio y ratificarán su apoyo por la inclusión de la protección animal en el Plan de Desarrollo. Según Andrea Padilla, de Anima Naturalis Internacional, "el Alcalde sí puede decidir sobre el uso de La Santamaría". Agregó que anualmente son torturados en Bogotá entre 70 y 80 toros.
'El alcalde Petro debe respetar la ley'
El gerente de la Corporación Taurina de Bogotá, Felipe Negret Mosquera, rechazó la decisión del alcalde Gustavo Petro y dijo que se deben respetar las tradiciones culturales de las minorías.

¿Cuál es su defensa?

El alcalde debe ser el garante del respeto a las relaciones jurídicas constituidas al amparo de la ley, como es el contrato vigente suscrito entre la Corporación Taurina de Bogotá y el Instituto de Recreación y Deporte (IDRD) y de los cuatro fallos que en esta materia ha dictado la honorable Corte Constitucional. Petro, congresista, no se opuso a los toros, votó positivamente la Ley 916 de 2004; confiamos en que como demócrata que es y como alcalde cumpla con la ley.

¿Por qué no estuvo de acuerdo con no matar el toro en las corridas?

Esa propuesta desnaturaliza la fiesta brava. Una preferencia personal no puede modificar siglos de tradición e historia. Podría parecer una postura terca de nuestra parte, pero así como pedimos respeto a la ley que nos protege como contratistas, también lo pedimos con lo que se consagra sobre las corridas. Además, porque estamos en una democracia.

¿Ustedes qué le han aportado a la ciudad?

No solo tradición histórica sino el pago de más de 12.000 millones con destino a los parques de la ciudad. Los toros representan una importante actividad económica que genera ingresos por turismo, sueldos, restaurantes, y en conciertos de la tauromaquia mundial la plaza de La Santamaría es un referente en América. Al alcalde le digo: "Se hace campaña en verso, pero se gobierna en prosa".

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