Palos de la Frontera. Una tarde de toros.

Paquirri, Fandi y Doblado a hombros con una gran corrida de Pereda
Lleno en tarde desapacible. Viento que molestó mucho por fases.
Toros de Pereda y La Dehesilla.(4 y 5).Excelentes de juego, destacan segundo, cuarto y sexto
Paquirri de verde y oro. Silencio y dos orejas
David Fandila "El Fandi" de vino tinto y oro Oreja 
y oreja
José Doblado de blanco y oro Silencio y dos orejas

Una tarde que empezó desapacible en lo ambiental Agua durante toda la mañana, viento al mediodía, lloviznas, frío por momentos.... Que con ese panorama la plaza se llenase demuestra que Palos de la Frontera sabe como ir a su Plaza del Descubrimiento. El cartel era repetido en la plaza, El reaparecido Rivera, el espectacular Fandi y el torero local y que se gana la repetición en cada tarde José Doblado. En frente una corrida de toros de Pereda-La Dehesilla de correcta presentación y de excelente juego. Brava, noble, con emoción y clase. El joven ganadero se merece alegrías como esta y va a tener muchas en vista del comportamiento homogéneo en bueno de los seis toros en lo que destacaron segundo, cuarto y sexto. Una pena que no terna ni publico supieran premiar el sobresaliente tono de la torada. Eso también es torero

Rivera venía tocado, tiene la rodilla maltrecha. Este principio de temporada de su reaparición no ha sido fácil, En su primer toro se le vio dubitativo, el viento no ayudaba, pero andaba como probándose, dudando más de si mismo y de sus condiciones, cuesta pasar de ser "torero" a "torero en activo" que de la nobleza del toro. En su segundo lo recibió con capotazos potables, pero fue en banderillas donde cambió el signo. El toro medía, cortaba, se venía andando y ahí el torero se vino arriba. Se la jugo en raza y conocimientos, un par al quiebro y otro al violín le hicieron sacar al Rivera que lleva dentro y con la pañosa supo cuajar buenos muletazos en series muy medidas. Una buena estocada le abrió el paso para una puerta grande que supo ganarse a ley.

Fandi es un hombre honrado, Toda la tarde da todo lo que tiene. Dos faenas de pundonor, de temple, completas desde los lances de recibo hasta la muleta por que el mal uso de la tizona le quitó trofeos en ambos toros. Con la capa los torea con sentido y largura, en banderillas les forma un lío, el quinto con una galopar templado y largo le permitió llevar a la plaza la emoción de las carreras de espaldas y pares muy espectaculares. Con la muleta el temple habitual del granadino. Su llegada a las gradas es inmediata con su verdad sin impostura.

Doblado se la vio en su primero con un toro exigente, muy bravo en el caballo y en la muleta, repetidor, noble en listo, El torero se fajó y sólo el mal uso de la espada le impidió triunfo sonante. En el tercero tiro de casta, lo toreó con soltura con la capa y en el tercio de muleta hizo faena de merito y verdad con muletazos importantes previos a la efectiva estocada.

Y se acabó la tarde. Una tarde de toros