TARDE IMPORTANTE DE SEBASTIÁN CASTELLA EN ALGECIRAS

Cortó dos orejas, con fuerte petición de la segunda en el quinto, saliendo en hombros

Media entrada. Toros de Fuente Ymbro, bien presentados, destacó el bravo quinto, premiado con la vuelta al ruedo.

Juan José Padilla, silencio y oreja.
SEBASTIÁN CASTELLA, oreja y oreja con fuerte petición de la segunda.
Iván Fandiño, silencio y silencio

Gran tarde la de Sebastián Castella en Algeciras, donde ha cuajado dos muy buenas faenas, especialmente la que le hizo al bravo quinto, un sobrero de Fuente Ymbro que salió al ruedo en sustitución de uno de los toros titulares de la misma ganadería tras descordarse de salida y tener que ser apuntillado. Antes de enfrentarse a ese buen toro, Castella sorteó en segundo lugar otro ejemplar noble y con calidad, al que Sebastián cuidó y entendió a la perfección, apurando al máximo la buena condición del toro. Esta su primera faena estuvo basada fundamentalmente en la mano derecha, pues por ese pitón el toro tuvo más duración y continuidad para entregarse al toreo de mano baja, pero de mucho temple, que ejecutó Castella. Una tanda al natural también tuvo temple y mucho ritmo. Mató de una estocada, tardó en caer el toro, y le concedieron al diestro de Beziers una oreja.
 Otra, con fuerte petición de la segunda, paseó Sebastián Castella del quinto, bravo toro, lidiado de sobrero, con el que redondeó una gran labor de mucha emoción, temple, ajuste y ligazón. Con el capote brilló en un gran quite por chicuelinas rematado con una revolera torerísima, e inició su labor en los medios, dejándose llegar al toro de Fuente Ymbro desde la larga distancia, para cuajarle un inicio que despertó mucha emoción en los tendidos. Desde ese instante, el toro embistió con fuerza y prontitud, imprimiendo importancia a todo lo que Sebastián le hizo. Por los dos pitones estuvo igual de redondo Castella, ligando muletazos largos, templados y profundos, en series que llegaron mucho al público en una faena redonda. Pinchó antes de la estocada que tiró al toro sin puntilla y la presidencia no atendió la petición de la segunda oreja. Sebastián Castella salió en hombros por la puerta grande.