Enero del 77.La transición del toreo. Una vieja huelga con un banderillero de paisano. CIntruénigo. Aparicio Y Litri, Periquito. Para Berlanga en sus mejores años

Así lo contaron El Pais y el ABC


Los subalternos han salvado el primer intento de ruptura de la huelga en que permanecen hasta que sean satisfechas sus reivindicaciones laborales. El festival, que estaba anunciado para el domingo pasado en Cintruénigo (Navarra), se celebró prácticamente sin cuadrillas.Un piquete de banderilleros de Zaragoza y otro de Madrid se desplazaron a Cintruénigo en la mañana del domingo. Ambos celebraron entrevistas con los subaltemos que iban a actuar en el festival -entre ellos Luis González- y lograron que no participasen. Les hicieron comprender -según fuentes de la agrupación sindical correspondiente- que en caso de que tomaran parte en el festejo sufriría un grave quebranto la postura adoptada por la mayoría y sobre todo el espíritu de solidaridad que ha podido conseguirse acaso por primera vez en la historia del toreo.

Esta mañana celebra una reunión la junta directiva de la agrupación y la comisión negociadora que designó la última asamblea de subalternos (en total unos quince profesionales) para estudiar la situación actual y las acciones a seguir. Como dijimos hace días en estas mismas páginas, hay anunciada para el próximo domingo una becerrada en Alcobendas, cuya celebración no tiene impedimento alguno por parte de los matadores de todas las categorías (pues no están en huelga), pero sí -es obvio- por la de los subalternos. El peligro de que puedan participar algunos de estos, dada la proximidad de Madrid, donde se encuentra domiciliado un alto porcentaje de éstos toreros, será compensado por el precedente de Cintruénigo y todo hace prever que se producirá un absentismo total.

El paseíllo de Cintruénigo -dice Cifra- resultó una escena insólita, pues lo hicieron únicamente los espadas anunciados -Julio Aparicio, Litri y los novilleros Jesús Márquez y Manuel de los Reyes-, más Carlos Romero,Periquito, que si bien es banderillero en activo intervino porque había sido él quien organizó el festival (y actuó de paisano) y un hijo del ganadero Julio Aguirre, en calidad de picador aficionado.

Hubo buena entrada y se lidieron cuatro novillos de Julio Aparicio y uno de Marisol Trilla. Manuel de los Reyes, que cortó una oreja de su primero y dos de su segundo, resultó cogido en éste y sufre un puntazo en la ingle, de pronóstico reservado. Jesús Márquez, dos orejas y oreja. Aparicio y Litri, que sólo estoquearon una res, fueron aplaudidos.