La
Escuela de Tauromaquia de Madrid ‘Marcial Lalanda’ abre este martes el curso
2014 con volteo de capotes y muletas, y con la presencia de un ex alumno que
triunfa estos días en las plazas mayores de la fiesta. Alberto Aguilar,
revelación de San Isidro 2013 y único diestro madrileño en los carteles de la
Feria de Otoño, impartirá esta tarde (18:30h.) la clase inaugural del curso en
la plaza de tientas de la Venta del Batán, sede de la escuela.
Aguilar
vuelve a la ‘Marcial Lalanda’ justo una década después de su salida, y en
vísperas de torear de nuevo en Las Ventas, el sábado 5 de octubre, la corrida
del Puerto de San Lorenzo de la feria otoñal madrileña. El aprendiz regresa
como maestro para compartir con los actuales alumnos enseñanzas, detalles y
claves de su carrera y triunfos. “El toreo, además de un arte y una expresión
cultural, es una carrera de relevos en la que los veteranos muestran el duro
camino a los jóvenes. Esa continuidad es algo que cuidamos especialmente en la
‘Marcial Lalanda’, precisamente por ser la única escuela taurina pública
madrileña”, señala Paloma García Romero, presidenta del patronato de la escuela
y concejal del distrito de Tetuán.
Un estímulo
La
presencia de antiguos alumnos del centro como profesores invitados es –añade- “un
estímulo para el medio centenar de chicos –y chica- que se forman con esfuerzo
y pasión para ser figuras del toreo”. Desde su creación en 1981, la Escuela de
Tauromaquia de Madrid ‘Marcial Lalanda’ -regida por un patronato mixto del
Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid- ha acogido a cerca de 2.500 alumnos y ha
dado a la fiesta 125 matadores de toros.
Aquí
han templado estoques y muletas maestros como El Yiyo –a cuya memoria está
dedicada la plaza de toros del Batán-, El Juli, Uceda Leal, César Jiménez, Luis
Miguel Encabo, Cristina Sánchez, El Fundi o Joselito. Los dos últimos fueron
los invitados de honor en la sesión de apertura del curso anterior de la
escuela./
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