Páginas

martes, 21 de mayo de 2013

Tomás Prieto de la Cal y los hijos e hijas de las comedoras de nabos




Andábamos ajenos a ciertos dimes y diretes que circulan por las redes y que afectan a un ganadero como Tomás Prieto de la Cal. En fin, nunca es tarde y a instancias de parte, un viejo amigo, nos definimos.






Empezamos por sentar premisas.

Si hay dos ganaderos que prestigian el nombre de Huelva y a la fiesta brava de nuestra provincia allá por donde van, estos son Fernando Cuadri y Tomas Prieto de la Cal. Ambos subyugantes en las distancias cortas, los dos con muy marcada personalidad, las ideas muy claras, una sólida consistencia argumental  y una coherencia de la que sólo pueden atesoran los muy grandes hombres. Se muestra Fernando mas pausado,  Tomás mas vehemente y menos políticamente correcto en su señorío. Dos caballeros del campo bravo.

Desde que empezamos a movernos en terrenos más allá de la pura afición, ambos han sido referentes por sus conocimientos, por el trato que nos han dispensado, por lo que aprendemos en cada charla con ellos, por su hospitalidad cariñosa, por su amabilidad señorial y por una forma franca de tratarnos que nos ha hecho sentirnos especiales y queridos, como me consta que hacen los dos ganaderos con todo aquel que se acerca a sus casas con el alma limpia y el corazón abierto.

Hablo hoy de Tomás Prieto de la Cal, un hombre que tiene una forma de entender la fiesta basada en el toro pleno de casta y defensor por fidelidad familiar de su personal encaste veragúeño hasta la muerte. Una forma antigua, romántica y con algo de cruzada que nos engancha. No es amante el ganadero de La Ruiza de la polémica, presume de no saber manejarse en la red de redes, pero no rehuye la pelea ni escatima ocasión para defender sus postulados. Envuelto a su pesar estos últimos años en controversias como la que me ocupa, se trata de una porfía desigual. Va Tomás por derecho, sin embargo sus oponentes andan por atajos miserables y ruines.

Jamás pensé yo que fuera a surgir esta pérfida porfía de un colectivo de aficionados madrileños a los que. acertados o equivocados en sus planteamientos, muchos y yo entre ellos, considerábamos nobles de intenciones. Se pueden o no compartir los postulados de la Asociación el Toro, pero mataría por que pudieran defenderlos, siempre que lo hicieran con hombría de bien, coherencia y lealtad. En este caso busquen los antónimos y entenderan nuestra indignación.

Resumo la cuestión. La vacada que pasta en el término de San Juan Del Puerto (Huelva) fue incluida en la lista negra de El Toro de Madrid, famosa y conocida, porque presumen de que no se casan con nadie e incluyen en ella a hierros de toda condición, respetable por mi parte, me guste o no. Curioso resulta,  para medir la credibilidad de este escalafón, que la ganadería también onubense de Pereda estaba en la lista blanca, mientras que la Dehesilla estaba en la lista negra. Que pregunten en que se diferencia un hierro de otro, ambos propiedad de José Luis Pereda.

Bien, además de incluir a los veraguas en la lista negra, la decepcionante Asociación afirma textualmente 
PRIETO DE LA CAL. Somos conscientes de la riqueza genética que guardan las reses de don Tomás y el momento delicadísimo que atraviesan este tipo de ganaderías, sin embargo, la novillada que echó en septiembre no tiene defensa posible, un auténtico pestiño que en nada recordó la estirpe de la sangre Vazqueña ¿Será por las últimas mezclas que ya no es tan vazqueña?". 

Las cartas publicadas en la Web de dicho colectivo dejan a las claras  el enfado de la familia Prieto de la Cal, no porque se ponga su ganadería en la lista oscura tras la mala novillada del 2012, mas bien por dudar de manera nada clara sobre la "pureza de sangre" de sus toros Veragueños, dando pábulo a rumores espurios. 

¿Que persona u organización de bien puede basar sus argumentos en el cotilleo, la malitencionada patraña nacida y extendida por míseros con interés directo en la difusión del cotilleo? Dicen los de "El Toro" en la respuesta a la carta de Teresa Gayan, esposa de Tomás  "Recogíamos sin afirmar nada, ciertos rumores que han aparecido en algún medo especializado..." ¡¡Hay que ser miserable!! Supongamos que de las progenitoras de todos o de cualquiera de los miembros de la "asociación el toro" dijera yo mismo que "sin afirmar nada, existen ciertos rumores que hablan de lo aficionadas que son las madres de los susodichos y susodichas socias, al consumo, pongamos, que de nabos (con perdón)". A estos señores y señoras tan amigos de las listas no les agradaría, por razones íntimas y subjetivas y por otras más objetivables, que yo los encuadrase en la lista negra de los "hijos de las comedoras de nabos", inocente producto del huerto de la familia de la crucíferas, cuyo consumo no es delito, que seamos conscientes, en ninguna legislación, por muy talibanes que sean los preceptos en que esta se inspire.

Hablar de pureza de sangres en el campo bravo, menudo asunto, ni un experto conocedor, como mi amigo Luismi Parrado, pondría la mano en el fuego por muchos. Por Tomás si se puede poner no una, sino las dos manos, y estar seguro de muchas cosas usando como único argumento el de la autoridad moral de que el ganadero goza por su integridad.

No me erigiré yo en defensor de Prieto de la Cal. Abogados y amigos de más enjundia no le faltan a Tomás y su familia, y sino miren en este enlace. Pero callar ante el argumento bastardo, enmudecer distantes ante el insulto cobarde por implícito a quien no lo merece, mirar hacia otro lado ante la indignidad, no es nuestro estilo. 

No eramos conscientes hasta hoy del ultraje, nos reclama y requiere una postura nuestro viejo amigo extrañado por nuestro silencio, y ante la demanda sólo quiero decir:

- Yo como amigo de esa casa. conocedor de su carácter, de su lucha y de su verdad, como onubense, como aficionado, como informador, defenderé a Tomas siempre y en todo lugar. Su trayectoria y su  palabra tienen para mi más valor que cualquier fehaciente certificado notarial.

- Quien falte al respeto a esta familia ganadera, me tendrá enfrente, siempre y sin matices.

- Por creer en la fiesta diversa, y aunque no creyera, ayudaré siempre y sin matices a Prieto de la Cal en su lucha para salvaguardar un encaste singular y ancestral

Otro día señores hablaremos de PUREZA DE SANGRES, de notarios y de meteduras de ganado y de pata. Hoy sólo queríamos decir que si lo dice Tomás, por definición, es verdad. Más aún si a quien desmiente el ganadero es a los hijos e hijas de las comedoras de nabos, repito que según se rumorea por el foro.

1 comentario: