En estas aulas aprobé mi COU y mi selectividad, mientras un tal Espartaco cortaba las orejas a uno colorao de Manolo González. "Facultades" |
Miguel Ángel
Perera ha
vuelto a las aulas. En esta ocasión, la cita ha sido en el colegio El Tomillar,
de Badajoz, y el aforo lo han formado ciento veinte chavales. Hasta allí ha
llegado el torero, acompañado de su mozo de espadas, quien portaba un vestido
de luces completo y un atillo lleno de trastos. Los niños, de entre once y
catorce años, se han mostrado encantados con el torero, a quien han recibido
con mucho cariño. Tres alumnos de Segundo de ESO han presentado un trabajo
sobre el campo y sobre la figura y trayectoria de Perera. Además, se han mostrado enormemente participativos cuando
se les ha dado la palabra.
Algo más de una hora se ha alargado el turno de
preguntas y respuestas entre los alumnos de El Tomillar y el torero. Los niños tenían curiosidad por saber
cuál era su plaza preferida, cuál ha sido su cornada más grave. En un tono más
distendido, alguno se ha soltado y le ha preguntado si alguna vez le habían
dado ganas de salir corriendo antes de un paseíllo, o por qué todos los toreros
ponen la boca igual cuando torean.
Sin lugar a dudas, la jornada en El Tomillar ha sido
una bocanada de aire fresco para el torero pacense, pocas horas antes de tomar
el vuelo que le llevará a México, donde le esperan tres citas muy importantes
en los próximos días. La primera, el sábado 26 en Texcoco, y las dos
siguientes, en Aguascalientes, el lunes 28 y el domingo 4 de mayo.
Miguel
Ángel Perera afronta sus próximas
citas en ruedos aztecas con mucha ilusión, sabedor de la expectación que ha
despertado su presencia en dichos carteles
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