Martín Lorca. Madrid, Madrid, Madrid...

En las últimas estribaciones de Sierra Morena pastan los toros del criador malagueño.

En “La Navarra” se formaliza una apuesta por Domecq, por Juan Pedro, por Torrealta, por el toro bien hecho que embista con verdad y empuje.

José Carlos Escribano gestiona con la ayuda del matador de toros José Borrero, los dos hierros de la casa, Martín Lorca y Escribano Martín, con la aspiración permanente de estar en plazas importantes,... y repetir.

Madrid vio el pasado verano saltar ejemplares de trapío suficiente y juego interesante para el aficionado y el torero.

 En este otoño se cuajan lo toros, se miman las vacas, y se cimientan los tratos del mañana.

Así está el campo ahora.