patria cabe mejor una buena novillada que una corrida de toros de aquella manera. Al final, la crisis va a traer soluciones al toro y cordura a las cabezas.
Los mimbres son sencillos, una buena novillada, bien rematada, estos pueblos ganaderos son pueblos sabios y Cabeza la Vaca lo es extremo, con este nombre no puede ser de otra forma, sabe de toros y tiene una afición que es modelo, llenando la plaza de entendedores exigentes pero amables.
Luego tres novilleros, tres novilleros con sentido, con ambiente, con sus clásicos autobuses, vinieron de Llerena y de Badajoz, cercanos en la nacencia, triunfadores de Sevilla, de Madrid, de Olivenza de Pamplona...
Y a las siete y media de la tarde suena el Clarín.
Y Campos Sale al ruedo y demuestra sus ganas de ser torero su fuerza su ambición con ambos novillos sabe enjaretar la faena precisa demuestra que está toreado, que está puesto que tiene ganas de ser gente en esto del toro. Al cuarto lo cuajo con el capote, buen inicio la faena sentado en el estribo, lo toreó primorosamente al natural templando y mandando, Al que abrió plaza le estructuró una faena muy inteligente, el toro humilló menos y el torero estuvo cumbre y un cañón con la espada.
Posada de Maravilla llena la plaza sólo son se desenvoltura, esa forma de andarle a los toros, de esperar, de darse tiempos, de salir de las suertes, tiene además ese don que es el ser torero hasta cuando estornuda. Al que hacía de segundo lo cuajo al natural en faena de mucho temple y gusto, imponiendo terrenos, resolviendo siempre con suficiencia, rematando las series con arte y abrochando todo con personaliad, Nos gustó mucho en su segundo, más apretado, toreo del caro con la mano de torear, trazo largo y verdad torera, cargando la suerte y dando el pecho, se tira a matar y deja media en el sitio que hace daño. Dos orejas de mucha enjundia a un toreo que llama la atención.
Lama cerraba cartel, recordad que debutó con caballos con Posada en Olivenza hace cuatro meses, pero anda puestísimo, al complicado tercero, que descabalgó al piquero y se quedó a medio picar, un toro en toda regla, con complicaciones y exigencias, lo toreó Góngora muy cadencioso con la capa, dando sitio y mandado, con la muleta soportó miradas, embestidas acostándose, derrotes y lo hizo todo queriendo ser fiel a su estilo. Muchísima transmisión para cortar dos orejas de ley. La mejor condición del que cerraba el excelente encierro de Clotilde Clavo permitió ver al sevillano con más profundidad, más en su línea de toreo, pero con la misma firmeza, por ambos pitones supo cuajar con gusto y hondura las bravas embestidas del burel.. Estocada desprendida que tardó en hacer efecto.
La salida en hombros de la terna en olor de multitudes nos proporcionn un chute de optimiemo sibre el futuro del escalafón, estos tres no están aquípara jugar, han venido para quedarse en la retina de los aficionados y en los primeros lugares del escalafón. Al Tiempo
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