Viernes, 25 de mayo de 2012. Madrid. Plaza de Toros de Las Ventas. Feria de San Isidro. 16ª de abono. Novillada con picadores. Tres cuartos de entrada. Novillos de Fuente Ymbro, Navalrosal (5º y 6º) y Juan Antonio Ruiz (4º bis) para:
Sergio Flores (Chenel y oro) saludos tras ovación y silencio tras aviso
Javier Jiménez (Grana y oro) ovación con saludos y silencio tras aviso
Fernando Adrián (Azul celeste y oro) aplausos y silencio
NOTA: Saludaron en banderillas José Luis López "Lipi" y Raúl Adrada
En el decimosexto festejo de la feria de San Isidro, hicieron el paseíllo, Sergio Flores que lució terno Chenel y oro, Javier Jiménez de grana y oro y Fernando Adrián que escogió un vestido azul celeste y oro. Se lidiaron cuatro novillos-toros de Fuente Ymbro, dos de Navalrosal-quinto y sexto- y uno de Juan Antonio Ruiz Román- cuarto bis-. El primer astado en saltar a la arena fue Hurón herrado con el número 122, de 512 kg de peso.
Sergio Flores saludó una ovación por su labor ante el primer novillo de latarde. El mexicano se antepuso al viento y las dificultades de su novillo en una faena que ha ido de menos a más. Lo mejor fueron tres tandas rotundas con laizquierda y dos más, que gozaron de intención pero carentes de brillantez, con ladiestra. Dejó media estocada caída. No pudo tocar pelo tampoco Flores en el cuarto. De nuevo, la entrega del mexicano no tuvo recompensa. A pesar de intentarlo, la emoción no llegó a los tendidos. No obstante, cabe destacar la actitud de Sergio Flores al continuar toreando y dar el do de pecho tras la brutal paliza que sufrió. Escuchó silencio tras aviso.
Javier Jiménez saludó una ovación en el segundo de la tarde. Con el capote, lo mejor fue un quite amexicanado de Adrián compuesto de saltilleras y dos gaoneras que remató con una revolera. Ya en la muleta, Jiménez expuso muchísimo en una faena llena de compromiso ante un novillo que tuvo peligrosidad y que, de hecho, le propinó un brutal volteretón en los primeros compases de la misma. El de Espartinas dejó lo mejor con la derecha pero no logró construir una faena rotunda. Seguía soplando el viento en Las Ventas. Tras un pinchazo, dejó estocada casi entera y dos descabellos.
Jiménez no pudo lucirse tampoco en el quinto del festejo. Sin ser malo, el novillo prometió mucho más de lo que luego dio y tan solo pudo llevar a cabo una faena con altibajos. Falló con los aceros.
Nada pudo hacer Fernando Adrián con el tercer novillo de la tarde. Fue este un novillo de nulas opciones para el triunfo y con el que Adrián estuvo más que digno. No se amedrentó el novillero tras sufrir una espectacular voltereta en la que el astado llegó a rasgarle la taleguilla aunque sin mayores consecuencias. Con buen criterio, el madrileño optó por abreviar. El sexto, en cambio, sí dio opciones pero Adrián no lo supo aprovechar. El exceso en el caballo y la falta de acople dieron al traste con la posibilidad de un momento de emoción en la novillada. Pero no fue así y terminó, con más pena que gloria, la tarde de las nadas.
Juan Carlos Antón/Madrid
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