Diez moviendo el mosquero. Los seis para seis de rejones

Por la mañana se nos encogió el alma, un caballo muerto en un plaza de toros es la parte más dura del riesgo, de este juego de la vida y la muerte. Sabemos lo que cuesta perder un compañero de corazón Bravo Rui,  se tragó las lágrimas bravas y la oreja es un buen regalo para Xelin. ¿El albero tuvo algo que ver? Pensemos que no, no hubo más incidentes

El ganado de hoy ha tenido el suficiente motor. Ese difícil equilibrio entre movilidad, nobleza y que dejen estar delante a los caballeros.

Como a Hermoso de Mendoza, no nos gusta esto de seis para seis, ni el seis para cuatro. La formula perfecta es abrir un festejo a píe. El seis para tres es buena cosa con mucha competitividad y nivel, si no...

Fermín Bohórquez es un lujo para el arte de poder a los toros a caballo. Sólo ver la montura vaquera nos huele a jara, su forma de parar los toros, por derecho y luego un leve recorte.

Diego Ventura juega en otra división, su cuadra está en el momento, su monta es la justa sin excesos y sin miedos, su conocimiento es el de un rejoneador maduro, sus ganas las de un joven aspirante

Buen momento el de Rui Fernandes estuvo, se fue y parece dispuesto a coger de nuevo el tren. La madurez es un arma cargada de futuro. Sus formas y su estilo tienen enjundia

Los jóvenes del cartel aprovecharon su oportunidad en distinto grado. Lo tienen complicado mientras en las ferias se reparta el único pastel como hasta ahora. Matilla y Chopera mandan.

Joao Moura es demasiado frío. parece el padre de su padre, que siempre será "El Niño Moura", la cuadra es un lujo preparada por padre e hijo. Ya ha debutado un tercer Moura de nombre Miguel.

La caballera rejoneadora, o dama rejoneadora Noelia Mota, no se le puede decir señorita rejoneadora, es sexista, ha demostrado que es eso, una señora rejoneadora, firme, asumiendo riesgos, con maneras de figura.

El otro portugués, tres para tres, Francisco Palha dejó alto el pabellón, ante el más parado del encierro, perfecta simbiosis con sus cabalgaduras, ni un tranco fuera de lugar, ni un carrera a destiempo.