Baena Bocanegra plantea una brillante defensa de la fiesta brava por lo civil y por lo pasional en el pregón taurino de Colombinas.

Con asistencia de numeroso publico, una onírica presentación a cargo de Curro Moro, primer teniente de alcalde del consistorio onubense, el acompañamiento musical de la banda de Música municipal, una nutrida representación de la sociedad civil y jurídica y escasa de la gente del toro, al menos dos antiguos pregoneros en el patio de la escuela de artes y oficios de León Ortega, Manuel Jesús Montes y Roberto Gómez, la presencia del alcalde Huelva y numerosos miembros del equipo de gobierno y de la oposición municipal, Francisco Baena Bocanegra, brillante letrado malagueño de nacimiento, sevillano de domicilio y asiduo veraneante en Huelva de punta a punta de Punta Umbría a la Punta del Moral, de las sardinas del Tabla a los arroces y caballas de Angustias.

Antes se se le tributó una cariñosa ovación en recuerdo de Joselito Romero, cuyo sombrero de ala ancha se echará mucho de menos estos días en muchos foros, en este el primero, luego volaron los folios hilvanados del pregón, el picaro viento y el espíritu burlón de José, no les quepa duda 

Huelva en la palabra de un hombre que vive de ella, como el médico de su bisturí, con la vocación tardía de quien no tuvo abuelo que lo llevará de la mano a la plaza de su pueblo ni más recuerdos de infancia que un leve juego del toro. No quiso defender, quiso el pregonero cantar la fiesta capaz de emocionar pero le pudo la deformación profesional y su pregón fue todo un alegato. 

Baena sabe tirar de jurisprudencia, al estilo consuetudinario de los juristas anglosajones, el Guerra, El Gallo , Belmonte, Florencio Aguilera, el obispo de Barcelona, Vargas Llosa, Joaquín Costa, Curro Romero, Litri  fueron los autores citados por el juriscosulto que echó mano del 149 de la Carta Magna para poner un interdicto a los desaprensivos que buscan atajos legales para acabar con una fiesta por su españolidad más que por ningún otro argumento.

No necesita defensa la fiesta dice el abogado que la defiende, y al estilo de esos abogados de peliculas americanas, sabe ganarse al jurado, argumenta con pasión su litrismo, Su currismo, su ojedismo y su morantismo, enlaza por derecho desde José hasta Juan, Manolete Litri, Curro, y Tomás que no se parece a nadie y tiene cosas de todos ellos.

El pregonero que se declara heterosexual, español por andaluz, currista y morantista, enamorado de su mujer y de sus cuatro hijos y siete nietos, desprecía a los fariseos y ama el torero de pellizco, admirando la definición de Litri del valor, ese "saber aguantar el miedo" o de Curro del toreo "Torear es acariciar".

Supo también nombrar a Emilio Silvera torero que en 25 años ha sabido demostrar que merece un sitio entre lo más grandes como este año se acrtela entre lo más grandes del torero actual desde el día de su alternativa con Manzanres y Ojeda, ¿Les suenan? en el cartel.

Supo el miembro de la Fundación Andaluza de Tauromaquia levantar al público de sus asientos en varias ocasiones, y demostrar al auditorio por que es un honor tener en nuestra trinchera a gentes del peso específico y la calidad profesional del abogado mediático y presente en todos los casos de mayor fuste de los últimos años. Malaya, Arny...

Agradeció para cerrar el acto Pedro Rodríguez el pregón, su onubensismo y sus formas toreras y argumentadas de defender la fiesta. "Uno de los mejores de los 16 que llevo oidos en primera fila" señaló el acalde.