Silvera, con una oreja, Agustín de Espartinas con dos y Sánchez Vara con tres dan réplica torera a un excelente encierro de Cabada con muchos matices.
Valverde del Camino, dos tercios de plaza, tarde de mucho calor, .
Emilio Silvera de azul pavo y oro gran ovación y oreja
Sánchez Vara, de grana y oro con cabos blancos dos orejas Y oreja
Agustín de Espartinas de blanco y oro , ovación desde el tercio y dos orejas
Primero y cuarto aplaudidos en el arrastre. Segundo aplaudido de salida
Raul Corralejo y Carvajal se desmonteran en el primero, Cobo y Carvajal en el cuarto
Buena tarde de toros, tarde para aficionados para gourmets del toreo, toros con casta, bravura y mil matices, en frente toreros que supieron resolver las papeletas, cada cual en su estilo y ctodos con decisión y torería. El público, magistral, silencios cuando se requerían, cariñoso sin dispendios en las orejas, respetuoso y savio, unplcae ver toros en Valverde del Camino.
Salió el primer toro, lo recibió con gusto Silvera, le pegaron el el caballo. Excelente la lidia de Cobo, magnífico Corralejo en Banderillas, sin distancias, a favor del toro y del matador pero torero los pares en lo alto, Carvajal fácil y pinturero. Inició Silvera la faena por el diestro, después de una serie de tanteo donde vió que el burel se le colaba y llo vuelve a avisar dos veces por el diestro y una al natural, siempre en lances por arriba, faena emocionante, la banda no arranca muda ante la importancia- El toro quiere coger, nada por arriba poco por abajo todo a media altura se lohizo un magistral Silvera, un desarme a la postre enfrió los ánimos, mal anduvo el del Molino con la espada, dos entradas en la suerte contraria una en la natural sin creérselo y estocada baja suficiente para dar muerte al toro que la tuvo de lo que fue, bravo encastado.
Al segundo cinqueño, lo recibió el manchego con precauciones, luego quitó por chiculeinas, el toro recibió dos puyas, Buscaito, de nombre un toro, ni grande, ni chico, sólo un toro bravo, la plaza en pie tras un meritorio tercio de banderillas del matador por la codicia del toro en todos los terrenos,, brinda a Tomás Campuzano, tantas veces triunfador en Valverde del Camino, comienzo flexionado en el tercio, se sale con el toro, mucha transmisión, pero poca duración, se acaba defendiendo, echando la cara arriba, el final de la faena fue una buena estocada de ejecución, caída y tendida pero, efectiva
El tercero, colorado ojo perdiz, descarado en su desigual cuerna, bizco del izquierdo. Entró con celo al caballo. La cuadrilla mitineo, no pudiendo con el bravo animal. El toro quería hacer carne, y el torero quería las orejas, la guerra era a muerte, los partidarios del de Espartinas calentaron los tendidos, no se afligía ni por miradas ni por coladas ni por tarascada. Agustín lo intenta al natural con toreros cambios de manos, se tira a matarlo por arriba, pasando el fielato de los pitones por el chalequillo. Toda la tarde . busca el de Espartinas la pureza y hacer las cosas bien, decabelló sin suerte ni maneras. Nunca sonó la música en la faena, la emoción la pusieron toro y torero.
Al cuarto, cinqueño, lo dejó entero Emilio, de amplia cuna, magníficos Carvajal y Cobo con los palos mientras Corralejo lidió con pulcritud, Se desmonteran de nuevo los rehileteros. Tras brindaral alcalde de la localidad, Miguel Angel Domínguez, Silvera comienza en el tercio y se lo lleva sin apreturas a ese espacio de entre las rayas de picar e los medios donde Emilio ha marcado sus territorios, el toro era más noble que sus hermanos en apariencias, era muy exigente y mirón y humillaba, quería un torero enfrente y lo encontró, se los fue dando uno a uno Silvera, lo fue desengañando y el último tercio de la faena fue a más con un derechazo que todavía se recuerda, cogió al noble negro de cebada en Triana y lo ssoltó en Sotiel Coronada, tras mil toques y un master de templanza. El toro, claro, se rajo ante el vendaval de torería de Emilio, una última serie del Maestro, con mayúsculas, del Molino fue un aviso a navegantes para los que no tienen palabra, ni sentido de las cosas. La casi entera, contraria de coraje, fue para si mismo, lo levantó con el verduguillo Carvajal y obligó a descabellar pero ya el triunfo tenía nombre y apellidos de torero: Emilio Silvera El toro fue aplaudido por su nobleza y bravura en la muerte.
Recibió al quinto de rodillas Sánchez Vara y, siempre de poder a poder en banderillas, valiente y con pies, el público pidio el cuarto para, torero comienzo, el torero, toro con menos recorrido y rajado embistiendo de lado, sólo pudo demostar sus ganas para redondear su triunfo con otra estocada efectiva.
Al sexto, más abrochadito de cara le enjaretó Agustín de Espartinas una faena dee querer triunfar, de novillero, de matador que llama a las puertas de las empresas. Los mejores naturales de la tarde surgieron de las muñecas del espigado matador olvidado de los abrunos que ayer dio un golpe en la mesa del toro, aquí hay torero.
Se acaba la feria, falta el íntimo salto a la fama de hoy pero Valverde ha disfrutado de una feria más que digna y la tarde de hoy es de aquellas que reconforta al verdadero aficionado, Mereció la pena ¿Saben Por que? Hubo toro y toreros en el redondel, toros que no se cayeron que embistieron con codicia no bobalicona, Y toreros que supieron resolver y triunfar, Viva la fiesta brava
Gracias por la cronica Javier. No pudimos ir porque hemos estado de vacaciones, pero leyendo la cronica enseguida me he situado.
ResponderEliminarMe alegro mucho por Emilio Silvera y Raul Corralejo.
Tambien me alegro mucho por la afición de Valverde.
Un saludo.