Espartinas. Hasta el sobrero, sobró casi todo.

Morante dejo su impronta de artista en Espartinas.

Mal encierro de Albarreal, chicos, tuneados, manseando y alguno con peligro, el primero entrepelao se dejó, el sobrero también burracón y de más presencia dejó que Morante se gustase y gustase.

Ortega Cano de malva y azabache a la goyesca, oreja silencio y silencio.

Morante de la Puebla, de blanco y azabache, ovación silencio y Dos orejas.

Tarde con molesto viento, lleno sin apreturas, mala la visibilidad de los tendidos de sombra en esta moderna plaza.

¿Que como estuvo Morante?. La pregunta se repite desde Espartinas hasta Huelva, con obligada parada y rabo en la venta Pazo, bien Morante estuvo bien, firme, torero, artista y poderoso con tres toros a contra estilo, hasta el sexto bis, tras lastimarse la mano el titular, no era un toro de Morante pero el de la Puebla está, está y se le espera en un mes en la Maestranza. Tras dos marmolillos, parados y mansos, vio la posibilidad de faena en el sexto, y se fue a por el morlaco, se le ve fuerte, en tipo, decidido, se le disfruta firme y maduro, hechicero en sus adornos, sólido en el toreo fundamental, basado en el pitón derecho del salpicao. Mató pronto y la fe morantista se vio confirmada. Con el capote se lució en un flamenco quite por chicuelinas, lástima que en un mano a mano no se pudiera paladear un sólo tercio de quites, cosas de antiguo cuño. Por cierto no brindó a nadie, ni a hermanos, ni colegas, ni al lucero del alba. ¿quien quiere salir en los pales, Sr. Vaquez?.

¿Que si Ortega está? La segunda pregunta, pues Ortega se gustó con el novillo que rompió plaza, tuvieron sabor sus lances con el capote, sus formas con la muleta no son las de este torero, hondo por definición, poderoso, Ortega codilleo, le tapó el viaje, pero estuvo artista, bullicioso y se le ve en forma El tercero de la tarde se rajó y el quinto congestionó o se desnucó y acabo en un lamentable espectáculo de convulsiones y temblores craneales ¿Que si está Ortega? que lo diga él, si su apoderado tiene que comprar esta corrida para que esté, pues a lo mejor no está, digo yo.

¿Que como estuvo el ganado?, ya lo hemos dicho, la culpa no es del ganadero que vende lo que le piden, pero después del buen sabor de boca de la corrida otoñal de Espartinas la primaveral nos ha dejado mal sabor de boca por la familia ganadera onubense. Si todos dieron volteretas será por que humillaban, el camino debe ser aumentar fuerzas y cuidar el trato En el campo estarán los buenos, seguro.