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domingo, 13 de abril de 2008

Miura no sorprende, ni engaña ni sirve

------------------ El ganadero de Zahariche junto a Cuadri y Paco Guerrero
Miura no sorprende, ni engaña ni sirve. Los toreros ni sorprenden ni engañan pero si sirven

Larga la tarde, en torno a las tres horas, vemos la corrida por la tele y nos atrevemos con la reseña por que Conchita se ha peleado con el bicho y ha roto el modem.

Al final nos quedamos en la playa cumpliendo con la propia y los niños, no se si alegrarme por que me gustaría haber agradecido en el Taquilla sus esfuerzos a la ferianta, las magníficas crónicas y la enjundia y calidad que le ha dado a este modesto blog que ya cuenta con corresponsales de primera linea. Espero compensarla en Palos de la Frontera la próxima semana.

Entiendo los problemas de Conchita con el ordenador, es para pelearse con alguien, la feria se las prometía felices, carteles de lujo, nombres de postín, ganaderías de triunfo, pero ... los inponderables, las ineptitudes y los monopolios se han cargado la feria. Manzanares ante una rata, la tarde de Liria, Cid y Ferrera con los Victorinos y Perera quedan en la retina, de lo demás poco se salva.

Sabíamos que la tarde de hoy no iba a levantar la feria, tres toreros honrados, una ganadería mítica cuyos representantes presumen de que sus toros no sirven para el toreo del siglo XXI (¿Que será el torero del siglo XXI?) buena entrada por ser domingo de feria.

Los toros de Miura no es que no sirvan para el triunfo, es que no sirven, se caen. En tipo de la casa, grandes altos y vareados a pesar de la romana. Su brusquedad y aviesas intenciones impiden más faena que las de aliño tan estimadas hace un siglo y tan denostadas hoy. Javier Valverde logró una oreja por su firmeza y pureza de conceptos en terrenos de faena grande ante un toro que embestía calamocheando incierto, pocas series pero de merito, en la tele pareció que la espada caía baja aunque entró en rectitud a pesar de eso oreja de ley. En el que cerraba plaza abrevió cosa que le agradeció el personal por que ante un elefante hay poca faena.

Fundi estuvo firme, por cierto las cuadrillas toda la tarde en profesional pero destacar la suya ante un sobrero del Conde de la Maza con peligro y ganas de hacer carne, su faena de las que antiguamente se hubieran premiado, no triunfó pero tampoco devolvió la oreja del día de Palha. Muy bien con el capote ante su primero.

Padilla bien, en Padilla, valiente en banderillas, sin locuras como la del pasado año y sin más aspavientos, torero y digno, pasó el trago y el año que viene más de lo mismo, a él le va la marcha.

No era esta la corrida para salvar la feria en número de trofeos pero si si se podía haber pedido un poco más de emoción. Tampoco.
Bien el presidente, nuestro amigo Juan Murillo, en la oreja de ley de Valverde y en el cambio de tercio ante los problemas en banderillas del toro que cerraba la feria. Es bueno que haya un aficionado sensible en el palco.

Momentos de análisis, nos cuentan que los maestrantes han concedido a Valencia y Canorea 75 años más, esperamos que sea falsa la noticia o al menos revocable por negligencia cual ha sido el caso este año Los veedores de ganado de la empresa también deberán ser cuestionados, hay ganaderías que no deben pisar el coso maestrante en unos años, la presidencia ya ha pagado con un puesto de cuatro, pero puede que hagan falta más cambios, la Maestranza debe decidir entrar en la modernidad no sólo con los carteles perfectamente prescindibles de Barceló, sino con obras en las instalaciones, modernidad en la empresa y vocación de ser taurinos no ganaperras.

Y al público recordarle que esto no es tenis, que el que paga tiene derechos, algunos irrenunciables como gritar, protestar, exigir, dejar de ir y otros fundamentales como disfrutar.

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