El Undécimo mandamiento: No ponerse "pesao"

El undécimo mandamiento: No ponerse “pesao”
Séptima del abono Tarde de agradable temperatura y viento que a veces molestó a los toreros, Dos tercios de plaza
Cinco toros de Valdefresno, bien presentados, mansos, deslucidos y faltos de casta y uno del Conde de la Maza que salió segundo fiero y mentiroso.
Antonio Barrera de blanco y oro con remates en negro, silencio y ovación. Matías Tejela de blanco y oro, silencio en los dos. El Capea, de nazareno y oro, ovación y silencio

Llego desde Sevilla, me siento ante "el bicho" y me sorprendo: ya ha colgado Cochita su crónica, No puede ser, la he dejado en el “ Taquilla” no parecía tener prisas ,…no al leerla observo que es la de ayer, pero el título puede servir. Desde el lunes la historia se repite. Nada que destacar
Los toros de hoy no han servido, el tercero, el menos malo, primero del Capea, tenía un buen pitón derecho que el de Salamanca sólo aprovecho en una serie ceñida y con cierto desmayo, por el izquierdo ni un pase, la faena se desarrolló en muchos y variados y terrenos igual que la que realizó al sexto, el Capea anduvo detrás de toro hasta toriles poniéndose pesado en el afán de agradar. Dos rápidas estocadas fueron lo mejor de su actuación. Bien "el Ruso" con los palos y en la lida del que cerraba plaza.
Matias Tejela se llevo como suplente a un bicho del Conde con el que la cuadrilla estuvo mal. Embestía con ansias al primer pase y luego se quedaba corto, le buscaba y era bronco, bravura mala, fiereza y peligro que la gente no agradeció, a lo mejor por ser de allende Despeñaperros a lo peor por que la tarde, sumada a las otras tardes invitó poco a otro reconocimiento que no sea al público, paciente y santo. En el quinto un manso de libro también cometió el error de alargarse en una faena que no llevaba a ningún lado ante un petardo insufrible, otra vez mal la cuadrilla y mal con la espada

Antonio Barrera enlotó con mal tino, ambos enemigos se rajaron , en el cuarto se empeñó en sacar agua de un pozo donde poco había por lo tobillero del morlaco y la falta de raza en cuanto se metía con el de Valdesfrsno, tampoco ayudo la lidia que recibió y el susto que se llevó el sevilano al inicio de faena cuando intentaba una larga cambiada y perdió pie ante el toro. El primero se deslomó después de dos volterertas, no fue honrado el torero y no lo enseñó para provocar el cambio lo hubieran cambiado, en el pecado lleva la penitencia, quizá le vio algo a su bonancible embestida, pero con un inválido no se puede enjaretar faena.
La tarde se puso pesada, la feria se ha puesto pesada, entendemos a los toreros en sus afánes de única tarde en la Maestranza pero .... Mañana con plaza llena esperamos que los Albaserradas de Moraleja, Liria que se despide, El Cid que los entiende y Ferrera que lo pelea levanten el ánimo y la preferia. Empeorar lo visto es difícil. Igualarlo complicado